Unas cuarenta personas, en representación de diversos partidos políticos y de las organizaciones sindicales, realizaron una concentración delante de la Subdelegación del Gobierno y un corte de tráfico para pedir apoyo a los refugiados de Siria. Procedieron a la lectura de un manifiesto, de solidaridad con los refugiados, que consideran que "forman parte de nuestra historia", por lo que piden el apoyo de todas las instituciones, reclamando que pongan "los medios necesarios para ampararlas". Sostienen que se trata de "derechos fundamentales, porque son gente que escapa de la guerra". Reclaman que la Unión Europea ponga en marcha una política común de acogida a los refugiados. Fernández Celis contempla la entrada de refugiados en Ourense, "no como un problema, sino como una oportunidad".