Casi una de cada tres empresas del Parque Tecnológico de Galicia (PTG) vende sus productos a nivel internacional. La Tecnópole, creada en 1992 y en la que se instaló la primera compañía en 1993, cuenta con 90 firmas, de las que 25 lograron dar el salto al exterior. El conjunto de las compañías que se encuentran en el recinto, cuentan con una facturación que gira en torno a 155 millones de euros, según los últimos datos computados en el año 2013. Proporcionan trabajo a 1.400 personas, la mayor parte de ellas con alta cualificación.

Capital gallego

Todas las empresas son de capital gallego, a excepción de dos que tienen capital extranjero en su totalidad (Alert Life Sciences Computing y ACS-Advanced Comfort Systems Ibérica), y otra en la que el capital extranjero asciende al 52% (Hispamoldes).

El sector de actividad más representativo entre las empresas de la Tecnópole es el de las TIC (más del 26%). El resto está muy diversificado, con presencia de los sectores de las energías, el agroalimentario, el biotecnológico, el de la automoción, el de la aeronáutica y el de servicios (comunicación, consultoría y call center), entre otros.

El Parque Tecnológico de Galicia cuenta en estos momentos con cinco nuevas parcelas disponibles para empresas, gracias al proyecto de ampliación culminado en 2013, que se tradujo en 37.000 metros cuadrados más de superficie urbanizable. Con esta ampliación, la superficie total urbanizada del PTG asciende en la actualidad a 595.000 metros cuadrados.

La sociedad gestora está volcada en este momento en la prestación de sus servicios a empresas bajo la premisa de la mejora continua y en el impulso del emprendimiento innovador. Gestiona el mayor vivero empresarial de la provincia (2.200 m2 de nidos en la incubadora principal: el CEI), al que se suma el de la Cámara de Comercio (también situado en su recinto), impulsa iniciativas de apoyo al emprendimiento y se involucra en otras promovidas por entidades con las que colabora.

La Tecnópole es, junto con el Cetal de Lugo, la base de operaciones del programa de aceleración de empresas Agrobiotech, puesto en marcha por la Consellería de Economía e Industria y en el que están ya participando once pymes de de los sectores agroalimentario, biotecnológico y de la biomasa, que recibirán soporte individualizado para incrementar su potencial innovador y acceder a nuevos mercados y vías de financiación.

La preincubadora que promueve con la Universidad de Vigo acogió este año cuatro nuevos proyectos, que permanecen en fase de desarrollo desde el mes de marzo. En este momento se encuentra también en marcha la segunda edición del programa gratuito de formación para la creación y gestión de microempresas, que el año pasado finalizó con muy buenos resultados. Además, la Tecnópole colaborará un año más en el Bioinvestor Day que se realizará en el mes de octubre.

A esto se une el esfuerzo de la Tecnópole por dar respuesta a las necesidades de todo tipo de profesionales, para lo que puso en marcha la primera sala de coworking de la provincia de Ourense, especialmente diseñada para autónomos que pueden compartir espacio de trabajo. Recientemente, el servicio se ha optimizado mediante un acuerdo que permite a los usuarios disponer de espacio gratis en otros 18 puntos de España.