La conselleira de Medio Rural y Mar, Rosa Quintana, reconoció ayer la compleja situación que vive Ourense a causa de la oleada de incendios forestales que obliga a mantener el operativo de extinción a pleno rendimiento. Durante la jornada de ayer el servicio de extinción de la Xunta movilizó medios para atajar las llamas en nueve fuegos diferentes en la provincia, entre ellos los de Cudeiro y Vilardevós, que se habían iniciado el viernes por la tarde. A estos se sumaron al menos otros siete a partir de las tres y media de la tarde que afectaron a los municipios de Cartelle, Castrelo de Miño, Coles, Rairiz de Veiga, San Cristovo de Cea y O Barco. Entre todos ellos superan las 200 hectáreas.
El fuego de Vilardevós permanecía estabilizado al cierre de la edición con una estimación de 176 hectáreas quemadas, mientras que el incendio de Cudeiro quedó extinguido a las 18,50 horas de la tarde después de los trabajos de finalización y refresco, con un balance de 23 hectáreas quemadas en monte raso. Este fuego, que volvió a cercar la ciudad, amenazó viviendas y obligó a desalojar dos casas, por lo que fue decretado el nivel dos de emergencia. Afectó a Vilar de Astrés y As Eiroás, donde peligró la perrera municipal y ardió el antiguo vertedero. La Policía Autonómica busca a los responsables de este siniestro en el perímetro rural de la capital y de los anteriores ya que todavía no se ha detenido al responsable del fuego de nivel dos que hace una semana quemó 55 hectáreas en esta parroquia amenazando casas y vidas humanas.
A las 18,50 horas quedó definitivamente extinguido con una estimación de superficie arrasada de 23 hectáreas de monte raso.
La conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana, que ayer participó en varios actos culturales en la ciudad, reconoció que la situación en la provincia es "complicada" por la sucesión de incendios forestales. El de Cudeiro, fue el "más complicado" de los últimos días por su proximidad a las casas.
Con todo, la conselleira pide a los ciudadanos "tranquilidad" ante esta oleada de incendios forestales. Según explica la titular de Medio Rural, el fuerte viento y la escasez de lluvias han favorecido la proliferación de fuegos, lo que también añade dificultades a los trabajos de extinción.
Provocados
También el alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, se refirió a "esta lacra" haciendo un llamamiento a la colaboración ciudadana ya que "la mayor parte de estos incendios son provocados y algún día puede haber una desgracia". Precisamente en el caso de Cudeiro muchos vecinos aseguran que "todo el mundo sabe" quien es el responsable de que arda reiteradamente en esta parroquia, si bien nadie da el paso de denunciarlo.
"Cuando uno planta fuego a un monte está plantando fuego a la gente y a las casas de los vecinos", advirtió ayer el alcalde Jesús Vázquez, quien ha pedido que todos sean "conscientes" para intentar atajar este mal que afecta cada verano a toda Galicia y en particular a la provincia de Ourense.
