El acuerdo alcanzado para sacar adelante la modificación de crédito es, para el alcalde popular Jesús Vázquez, fruto del diálogo y la negociación con el resto de grupos políticos de la oposición. El regidor recalca que se sustenta en la máxima de su discurso de investidura: "mano tendida" . Y aunque se trata de una "satisfacción plena", debido a que se rebajan más de 5,3 millones de euros sobre la propuesta inicial del gobierno -de algo más de 11,7 millones-, proclama que "es una modificación de mínimos, pero fundamental para poder gestionar", y sobre todo para que "no se paralice la ciudad".

En el proceso negociador los grupos políticos plantearon sus demandas y exigencias para prestar su apoyo. Vázquez reconoce que alguna de ellas "era inasumible", aunque al final se pudo llegar a un punto de encuentro que permite llevar el expediente, con varios apartados, al pleno que se celebrará el próximo miércoles, 12 de agosto.

Sobre la postura de los grupos políticos, el alcalde subraya que por parte del portavoz socialista, José Ángel Vázquez Barquero, se entendió que "era necesario avanzar", sobre todo en lo que se refiere al pago de facturas de anteriores ejercicios, así como las subvenciones a asociaciones, al igual que los convenios con otras administraciones relacionados con proyectos como están en marcha, aclara el alcalde.

"No se podía esperar más", fue el mensaje que trasladó tanto el alcalde al inicio de las conversaciones con los portavoces de los grupos de la oposición, y que durante las negociaciones reiteraba la concejal de Hacienda, Ana Fernández Morenza. Eso llevó consigo que los encuentros fuesen diarios, y con ello se realizase un "esfuerzo" para llegar al acuerdo que permita aprobar la modificación.

Acuerdo y participación

Aunque la modificación de crédito, que da respuesta a unos mínimos acordados, debe ser rubricada en el pleno extraordinario, en el que el alcalde espera que se cumpla lo acordado, por lo que descarta cualquier tipo de sorpresa, en lo que se refiere al proceso de negociación "se contó con todos los grupos políticos", sentencia el alcalde.

De esa forma sale al paso de las manifestaciones realizadas por ediles de Ourense en Común (OUC), en relación a que no se había contado con ello. "No es cierto", asegura de forma enérgica Jesús Vázquez, ya que la edil de Hacienda habló con ellos, pero no hubo ningún tipo de propuesta o planteamiento al respecto.

Sin entrar en polémicas, el proceso que se sigue en OUC, la de adoptar decisiones previa celebración de asambleas, y que ya fue objeto de crítica por parte del portavoz de Democracia Ourensana, Gonzalo Pérez Jácome, en este caso, la premura de tiempo para resolver asuntos pendientes urgentes, como pagos de facturas, subvenciones y aportación municipal a convenios, requería de una mayor agilidad.

Unas cuestiones que desde el primer momento se pusieron encima de la mesa, y que forman parte de la denominada "herencia" recibida del anterior gobierno socialista. Una cuestión que para el alcalde debería haber quedado resuelta: "Se debió aprobar antes de que concluyese el anterior mandato".

Pero llegados a esta situación, para Jesús Vázquez es fundamental hacer frente a los compromisos que se adquirieron en su momento, como es el tema de la facturas, debido a que los "grandes perjudicados son los proveedores", así como las subvenciones-convenios con entidades sociales que desarrollan un importante actividad social. Entre estas se encuentran Cáritas con el comedor social, junto con la aportación para comedores escolares, y los programas de emergencia social.

Programas sociales

Lo que en principio también se incluye en la modificación, al contar con el apoyo del grupo socialista, es la financiación correspondiente para poner en marcha nuevos programas sociales, en concreto el de "Ourense Integra", con una partida de 250.000 euros, y que se destinará a cubrir ayudas de carácter periódico dirigidas a personas en situación de vulnerabilidad social que, por diferentes motivos, no pueden acceder a las prestaciones regladas de otras administraciones públicas, como pueden ser el Risga o las pensiones no contributivas.

En lo que se refiere a la demanda del gobierno para dar "oxígeno" a las concejalías para poder hacer frente a compromisos y proyectos pendientes, como sucede con la de Cultura, el alcalde considera positivo el acuerdo con los socialistas, ya que 240.000 euros se destinarán para pagar lo que quedó pendiente, con un incremento de algo más de 50.000 euros para actividades en los meses que restan del año.