La fiesta de los trabajadores sirve también para visibilizar a aquellos colectivos que sufren con mayor intensidad los efectos de la crisis económica, los recortes sociales y la precariedad en el empleo que, según los sindicatos convocantes, han alcanzado niveles "dramáticos" en Ourense.

Aspanas es uno de estos colectivos. El comité de empresa de la entidad fundacional se sumó a la movilización de CCOO y UGT, mientras que Aspanas Termal participó con la CIG, central que los apoya desde el inicio de un conflicto laboral que se prolonga en el tiempo y que acumula 11 meses de impagos. Para ellos hubo mensajes de solidaridad, como también los hubo por parte del secretario comarcal de la CIG, Etelvino Blanco, para los tres estudiantes condenados por los incidentes de la Biblioteca en octubre de 2012. "Salieron a defender la educación pública y fueron condenados injusta y desproporcionadamente por el aparato judicial", afirmó.

También destacó la CIG a los emigrantes retornados que "tuvieron que marcharse deportados y ahora se les tacha de defraudadores cuando los verdaderos defraudadores están en el gobierno y en el poder económico", apuntó Blanco.

Comisiones Obreras y UGT también destacaron la lucha iniciada por la plataforma creada contra la privatización del Rexistro Civil, presentes en la manifestación con sus camisetas amarillas, y la de los trabajadores de Correos, que reivindicaron un "correo público y viable".

La CIG quiso restar importancia a la división sindical y su secretario comarcal defendió que el 1 de Mayo "lo importante es celebrar este día, que salgamos con media hora de diferencia no es el problema de la clase obrera". No obstante, lamentó que "otros compañeros no estén a la altura" de la lucha por la dignidad laboral que la CIG "mantiene durante todo el año".