Una cadena de robos cometidos en menos de una semana. La Guardia Civil de Ourense custodia en los calabozos de la Comandancia a un vecino de Carballeda de Avia con antecedentes y 46 años de edad, al que los agentes de la autoridad atribuyen el robo de una furgoneta en Castrelo do Miño, un atraco a punta de cuchillo y con un pasamontañas perpetrado la noche del miércoles en una gasolinera de O Piñeiral, en el límite entre la ciudad y el municipio de San Cibrao das Viñas, más un robo mediante "alunizaje" que tuvo lugar la pasada madrugada en un bar de la primera localidad. Una ristra de delitos en unos 40 kilómetros de radio de acción.

El supuesto delincuente, que ya pasó por prisión en el pasado, cayó en el cerco activado por la Policía Local de Ourense después de recibir aviso de la Guardia Civil. A las 4 horas de la madrugada del domingo al lunes, el cuerpo municipal recibió comunicación de que el vehículo sospechoso, una furgoneta Citröen Jumpy que fue sustraída la pasada semana a un bodeguero de Castrelo do Miño, había sido utilizada para la comisión de un robo mediante "alunizaje" en un bar de Carballeda de Avia.

Según las fuentes consultadas, el individuo empotró la furgoneta marcha atrás y se apoderó de una máquina tragaperras. En la planta superior, dormía la madre del propietario del bar. El instituto armado trazó entonces la aparente conexión entre este suceso y el atraco que tuvo lugar el jueves en la gasolinera.

La Policía Local de Ourense puso en marcha un dispositivo de localización en el que tomaron parte todos los efectivos integrantes del servicio de noche, según precisaban ayer desde la jefatura. El supuesto autor del robo en Carballeda de Avia fue localizado a más de 30 kilómetros de distancia, en Ourense, media hora después de los hechos. Los municipales encontraron la furgoneta estacionada, sin conductor, en la Plaza Diana, que se encuentra en el barrio de Covadonga, uno de los puntos principales de compraventa de droga en la capital de As Burgas. En el interior estaba la máquina tragaperras.

Los agentes establecieron un dispositivo de vigilancia y espera, cortando todas las posibles salidas en caso de que el sospechoso intentara una fuga. Minutos después de las vigilancias, el presunto ladrón se acercó al automóvil. El hombre hizo una maniobra para cambiar su dirección pero fue interceptado por otra patrulla a los pocos metros del lugar.

La Guardia Civil se ha hecho cargo de las diligencias y está investigando la implicación en delitos del detenido. Cuando termine las averiguaciones, el hombre será puesto a disposición del juez.