Septiembre está siendo un mes negro para las carreteras de la provincia. La muerte ayer de un conductor de 78 años que circulaba por la OU-536 en Pereiro de Aguiar eleva a 12 el número de fallecidos en la red viaria de la provincia en lo que va de año, una cifra que se disparó durante los meses del verano, período en el que se duplicaron las víctimas mortales con respecto al cierre del mes de junio.

El siniestro registrado ayer en el que murió M.C. L., vecino de Ourense, es el tercer accidente de tráfico con resultado de muerte en lo que va de mes. Antes de este septuagenario falleció una mujer de 43 años al despeñarse por un terraplén en el embalse de San Fiz, A Veiga, y un peatón murió atropellado esta misma semana en Xinzo de Limia cuando cruzaba la carretera frente a su casa.

Ayer, M.C.L. circulaba a las 11,40 horas por la carretera de Trives en dirección Ourense cuando perdió el control de su vehículo, un Peugeot 306, y a la altura de Santa Baia, en Pereiro, invadió el carril contrario y fue a colisionar lateralmente contra un muro en la margen izquierda, concretamente contra la columna de piedra del cierre de una finca.

El conductor quedó atrapado en el interior y tuvo que ser excarcelado por los bomberos de San Cibrao, movilizados por el 112 al igual que el GES de Pereiro. Para rescatar el cuerpo del conductor, ya sin vida cuando llegó el equipo de excarcelación, fue necesario retirar los asientos y extraerlo por el maletero, ya que el marco de la puerta quedó totalmente machacado atrapando al conductor por las piernas.

El siniestro se registró en el kilómetro 11 en una zona con más casos de siniestralidad viaria achacados, según comentaron algunos testigos, al pavimento. Ayer, a causa de la lluvia, estaba resbaladizo. Se trata de una curva que acumula varios siniestros con heridos en los últimos años. Uno de los efectivos que participó en el operativo asegura que el cierre de la margen derecha fue derribado en tres ocasiones por el impacto de vehículos siniestrados por lo que el tramo se considera "conflictivo". Otros testigos hicieron llegar a uno de los empleados de mantenimiento de carreteras que se desplazó al lugar las quejas por el estado del firme.

Además de los bomberos de San Cibrao y el GES de Pereiro participaron los agentes de la Guardia Civil de Tráfico y Urxencias Médicas. El subsector de Ourense aclaró que el conductor siniestrado llevaba puesto el cinturón de seguridad y que la vía no sufrió cortes de tráfico significativos.

Este accidente eleva a 12 el número de víctimas mortales por accidente de tráfico registradas en lo que va de año. A lo largo de 2013 fallecieron 15 personas. Hasta el 30 de junio del año actual había seis víctimas registradas, pero el verano ha sido negro para la siniestralidad viaria, con seis fallecimientos.