Con una máxima de 36 grados, el fuego disparó el peligro ayer en la localidad próxima a Ourense de Santa Cruz de Arrabaldo. Las llamas iniciadas en una finca con maleza a primera hora de la tarde cercaron varias viviendas del núcleo concebidas para trabajadores de Renfe -alguna continúan habitadas- y que se ubican en las proximidades del trazado del tren. El incendio obligó a parar un convoy de línea convencional por la proximidad de las llamas a la vía, mientras los los medios aéreos movilizados a las labores de extinción descargan agua sobre el foco para impedir su propagación.

No hubo transbordos de viajeros ni más perjuicio para los ocupantes que tener que permanecer diez minutos a la espera. El tren reanudó su marcha en el trayecto Ourense-Santiago de Compostela en torno a las siete y media de la tarde, tal y como confirmaron desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF).

El fuego comenzó poco antes de las 15,30 en una zona de matorral entre la estación ferroviaria de Santa Cruz de Arrabaldo (Ourense) y la autovía A-52, y se expandió ladera arriba por una pendiente de difícil acceso, según fuentes del servicio de extinción, hasta quedar controlado alrededor de las 20,00 horas. Según la consellería de Medio Rural e do Mar, ardieron aproximadamente 4 hectáreas, la mayor parte de matorral.

En el operativo de extinción trabajaron un agente forestal, seis brigadas - tres de ellas, transportadas en helicópteros de bases de las provincias de Ourense y Pontevedra-, cinco camiones motobomba, tres avionetas de carga en tierra de la base de Beariz y finalmente, una pala bulldozer que cortó el avance de las llamas en el monte.

Los primeros en llegar a la zona, después del aviso de la Policía Nacional, fueron cinco bomberos del parque de Ourense que evitaron que el foco inicial afectara a una vivienda situada en las proximidades de la estación de Santa Cruz de Arrabaldo, según informaron desde el servicio de emergencias.

Con el calor intenso de regreso, el monte vuelve a ser un polvorín en la provincia de Ourense. La Consellería de Medio Rural e do Mar elabora un índice diario que determina el grado de riesgo de incendio forestal por áreas geográficas, teniendo en cuenta la situación meteorológica, el estado de la biomasa vegetal, el estado de las infraestructuras preventivas de masas arbóreas y el estado del suelo.

El índice de ayer anuncia un riego extremo de incendio forestal en buena parte del sur y el oriente de la provincia de Ourense. En lugares como Baltar o la montaña de Valdeorras, existía una probabilidad de más de un 81% de que el monte ardiera. En el resto del territorio ourensano, salvo pequeños sectores, los incendios entrañaban un peligro entre alto y muy alto (entre un 57 y un 80% de probabilidades).