En un clima de recortes de ayudas, "copago, repago y requetepago", el presidente de la federación en favor de las personas con una discapacidad intelectual en Galicia (Fademga-Feaps), Eladio Fernández, se indignó ayer en público por una supuesta deriva en las políticas para sostener la dependencia. "¡Basta ya!; nuestros hijos no pueden pagar las 'falcatruadas' de otros", clamó en su turno de intervención en el acto de inicio de la decimoctava convivencia de familias "Special Olympics", celebrada en el Instituto Número 1 de O Carballiño para evitar la previsión de lluvias. El ambiente lúdico, con comida, música y actividades para unir al colectivo y a sus familias, se inició con reivindicación y reproches.

En presencia de la secretaria xeral de Política Social, Coro Piñeiro, el delegado territorial de la Xunta, Rogelio Martínez, el alcalde de O Carballiño, Argimiro Marnotes, y varios diputados de PP, PSOE y BNG, el presidente de Fademga comenzó su discurso instando a la clase política a impregnarse de la realidad social "para que cuando gobiernen puedan trabajar con conocimiento de causa".

La federación aglutina a 42 asociaciones que prestan servicio a 5.500 personas con una discapacidad intelectual y atienden a las preocupaciones de unas 10.000 familias en Galicia. Con más de 2.000 trabajadores, una veintena de residencias, más centros de día, ocupacionales y de empleo, así como servicios de transporte y atención sanitaria especializada, son una parte fundamental de la red de cuidados a las cerca de 80.000 personas que, según la Xunta, tienen una discapacidad intelectual en Galicia. Dieciocho entidades y más de 800 personas, incluyendo voluntarios y medios de la organización, estaban presentes ayer en O Carballiño.

En plena negociación con la Xunta sobre la cartera de servicios para personas con una discapacidad intelectual, Fernández pidió un mayor ratio asistencial e instó al gobierno gallego a que "diga cómo pagará lo que legalmente se exige". Citando un informe de la fundación Caser, el portavoz del colectivo subrayó que los propios beneficiarios asumen más de su bolsillo -un 29% del gasto- que la media correspondiente a las comunidades autónomas (16%).

La federación asume las dificultades de la crisis, pero en su justa medida. "No queremos privilegios para nuestros hijos, queremos igualdad; un servicio para que los nuestros tengan calidad de vida, no que sufran mientras otros hacen falcatruadas", remató.

Horas después, Eladio Fernández incluso agravaba su postura en una conversación con FARO. "Es una inmoralidad que se nos pidan sacrificios, que prácticamente a una persona con discapacidad intelectual le queden solo 4 euros para su vida diaria entre copagos y repagos de servicios mientras se está robando a manos llenas". El reparto de cargas supone, para Fademga-Fesga, un lastre para "familias de clase media-baja, algunas en las que la prestación del hijo con discapacidad intelectual es el único ingreso, insuficiente, para pagar residencia, transporte, medicamentos no incluidos en el catálogo y, además, comer".

Según asegura, "se nos recorta el número de cuidadores y de plazas y se nos recorta en los servicios". El colectivo quiere que el ratio se aproxime, al menos, al de los centros propios de la Xunta, que disponen de un cuidador y un educador por cada 4 personas. También, que se asigne según las necesidades.

La intervención del presidente de Fademga precedió al discurso de la secretaria xeral de Política Social, Coro Piñeiro, que dio por inaugurada la jornada de convivencia. El cargo de la Xunta aludió al "tinte de gravedad de las palabras de Eladio" para comprometer el apoyo "prioritario e irrenunciable" de la administración gallega a favor de las personas con discapacidad, con "un trato diferenciado para la discapacidad física e intelectual".

Tras las críticas del colectivo, Piñeiro esgrimió las cifras presupuestarias. Según su intervención, las cuentas contemplan partidas diferencias según la minusvalía con un incremento de un 6% y un total de 97 millones de euros. En un comunicado posterior, la Xunta asegura que ha colaborado con Fademga con "más de 3,5 millones de euros" entre los años 2009 y 2013.