La Guardia Civil investiga el origen de dos impactos de escopeta registrados en un vehículo y en una casa en el término municipal de Boborás (Ourense), en la localidad de Brués y Pazos de Almuzara, a tres kilómetros de distancia. El ataque se produjo pasadas las tres de la mañana.

"Escuché un estruendo y pensé que era un petardo, y al poco tiempo, otro más lejos. Por la mañana vi el boquete al lado de la puerta", explica Rosa María Fírvida, propietaria de Casa Ramón, en Pazos de Almuzara. Todo indica que los autores pasaron en coche por delante, tirotearon la fachada y siguieron por la N-541 en dirección O Carballiño.

Los agentes tuvieron conocimiento a través de una llamada telefónica de una vecina de Brués, donde estaba estacionado el vehículo a la orilla de la carretera N-541. El proyectil de escopeta, según los agentes, dejó un amplio boquete en la puerta y provocó la rotura del cristal. Hasta que culminen las averiguaciones de la Policía Judicial, la Guardia Civil no da por cerrada ninguna hipótesis. No se descarta que se trate de un acto vandálico.