La Guardia Civil considera que las alimañas devoraron el cadáver del holandés Martin Verfondern y dejaron los huesos dispersos entre la maleza, "después de consumir toda la carne", en un radio de cien metros en torno al lugar en el que apareció calcinado el todoterreno, en un pinar de A Veiga, de difícil acceso, donde permaneció oculto durante casi cuatro años, hasta que fue detectado por un helicóptero de la Guardia Civil.

Fuentes de la investigación revelan que el caso "está bien encauzado" y esperan que pueda haber una pronta resolución. La Comandancia de Ourense confía el esclarecimiento de los hechos a la unidad que ya resolvió el asesinato de la joven de Viana do Bolo, Montserrat Martínez, y la muerte del conductor de autobuses asesinado en Verín, al que se suma otro grupo de apoyo, por lo que desde hoy habrá entre ocho y diez agentes trabajando en el caso.

El perro que localizó los restos óseos, el pastor belga "Pipo", ya regresó a Madrid, después de cubrir una brillante página en su libro de servicios. Las principales hipótesis que maneja la Guardia Civil son que el holandés pudo haber sido asesinado por una disputa sobre el aprovechamiento de unos montes, junto a la posibilidad de que pudiera darse un problema de dinero o drogas, como detonante.

El forense Fernando Serrulla explica que la identificación de los restos, para conocer si corresponden al holandés Martin Verfondern, "se puede realizar en un par de días o demorarse durante tres meses, dependiendo de cómo vayan las cosas". La odontología "permite conocer la identidad en un par de días. Si no tenemos un buen cotejo odontológico, una ficha dental y no hay dentista, a lo mejor hay que esperar al ADN, que son tres meses". También se podría acelerar la identificación, "si encontramos una radiografía del señor", agrega. El tiempo de espera para resolver la identificación, mediante el análisis del ADN, por lo general suele demorarse tres meses, pero "en ocasiones se resuelve en treinta días y en otras tarda medio año", dependiendo de la carga de trabajo que tenga el laboratorio que lo realice. No adelanta ningún detalle sobre el estado de los huesos, al encontrarse bajo "secreto de investigación", algo que puede ser fundamental para la resolución del caso.

Por otra parte, el alcalde de A Veiga, Miguel Bautista, ha presentado una denuncia en el puesto de la Guardia Civil de A Rúa contra la mujer del holandés, Marga Pool, contra la periodista Marta Vázquez y La Voz de Galicia por unas declaraciones que recoge el diario sobre posibles sospechosos. Hoy formalizará la demanda en el juzgado de O Barco.