Un compromiso de que se pueda volver a la normalidad. Es lo que transmitió ayer el director de la residencia universitaria de Ourense "As Burgas" en el sentido de que las instalaciones puedan reabrir en el próximo curso, después de confirmar que el cierre llega tras la decisión del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), que dictó una "sentencia firme" por la que condena al Concello de Ourense a la clausura de la instalación y el precinto de su actividad.

Así, en su comparecencia, frente a la propia residencia, el, Jorge Rodríguez aseguró que en la próximas semanas "intensificaremos aún más nuestros esfuerzos y conversaciones con el Concello y Junta de Compensación - propietarios de los terreno del polígono urbanismo en el que se encuentra ubicada- para intentar reabrir cuanto antes".

También dijo ser consciente de que "llevamos sufriendo dificultades desde el arranque del servicio y de que, a pesar de mucho trabajo y esfuerzo, no se nos ha permitido regularizar la situación", para señalar que siempre han operado "dentro de la legalidad" con "licencia de obra y actividad concedidas por el Concello, con una concesión administrativa adjudicada en concurso público y con la ayuda cercana y cooperación incansable de la comunidad Universitaria".

Es por eso que emplaza "a la Junta de Compensación, el Concello, y a nosotros mismos, a trabajar activamente durante los meses de julio y agosto para encontrar soluciones que nos permitan seguir prestando de nuevo el servicio desde mediados de septiembre". En este sentido, Rodríguez proclamó que "estamos comprometidos al máximo con este proyecto y no vamos a dejar de luchar por él".

Unas manifestaciones que se producen después de que la edil de Urbanismo, Áurea Soto, advirtiera que el cierre puede prolongarse hasta un año, ya que ese es el plazo que se establecería para ejecutar las obras de urbanización necesarias para que el Concello otorgue la licencia de ocupación, con la que la residencia no cuenta en la actualidad.

Durante el presente curso que está a punto de finalizar. El complejo contó con cerca de 160 residentes y 70 han manifestado su deseo de solicitar una plaza el próximo curso, a expensas de lo que suceda, según la dirección del centro

Junta de compensación

Y mientras el director de la residencia universitaria mostraba su convencimiento de que es posible poder abrir para el próximo curso académico, la junta de compensación del polígono de Las Lagunas, dejaba clara su postura a través de un comunicado, en el que aseguraba que el cierre de la Residencia Universitaria ordenado por sentencia judicial se debe a la anulación de la licencia de ocupación "manifiestamente ilegal otorgada por el Concello a propuesta de la edil, Áurea Soto".

También subraya que el funcionamiento de la residencia universitaria en condiciones de legalidad y seguridad requiere ineludiblemente la realización de las obras de urbanización de su entorno, obras que en su día se comprometió a realizar la empresa concesionaria y que, a lo largo de los trece años transcurridos desde la apertura del establecimiento, no llevó a cabo.

Y concretar que la junta de compensación presentó para su aprobación un proyecto de urbanización que comprende la totalidad del polígono, incluido el entorno de la residencia universitaria. Dicho proyecto de compensación cuenta con todos los informes técnicos favorables. Y que asume en exclusiva la realización de las obras de urbanización de todo el polígono, incluidas las correspondientes al entorno de la residencia universitaria, como lo manifiesto ante el Concello, aun cuando ello "representa un coste extraordinariamente superior al que en su día se ahorro".