Una de las quejas que más se repiten en O Carballiño, y sobre todo tan pronto llega el buen tiempo, es la circulación de bicicletas por la calle principal, mezcladas con los peatones que circulan por la misma, al tratarse de un vial cerrado al tráfico rodado. Y es que son muchas las personas que han tenido que sortear a los ciclistas para no ser atropellados.

Desde el concello aseguran han buscado soluciones a este problema, pero ahora la nueva normativa de tráfico impide tomar mayores medidas que las de evitar que estos vehículos circulen a mayor velocidad de la permitida. Y es que las bicicletas ya pueden circular por aceras y zonas peatonales, siempre que lo hagan de forma cuidadosa y despacio, para ofrecer mayor seguridad a los peatones, sobre todo niños y personas mayores. El problema es que hasta ahora las quejas refieren que los ciclistas circulan a velocidades nada moderadas.

El responsable de Tráfico del Concello de O Carballiño señala que, al permitirse el paso de esos vehículos por la calle peatonal, lo que va a intensificar es la vigilancia para que lo hagan a velocidades mínimas. Para vigilar que se cumpla esta normativa se contará con la ayuda de los auxiliares de Policía Local, que un verano más serán contratados por el concello, precisamente para ayudar a los agentes en la época en la que la población se duplica e incluso triplica.