A.A.L.C., de 48 años, y M.L.M.D.J., de 42, se enfrentan a 1.620 euros de multa y a unos 2.000 en indemnizaciones. Fueron juzgados ayer por un presunto delito continuado de defraudación de fluido eléctrico. Según la Fiscalía, después de que la compañía les cortarse el suministro en enero de 2008, manipularon el contador de su vivienda. La empresa hizo cortes sucesivos durante 2009. En septiembre, se detectó el presunto fraude tras un accidente en el cuadro eléctrico que obligó a intervenir a los Bomberos. El fiscal pide que indemnicen al Concello. Pero la acusación sostiene que otra vecina del edificio fue perjudicada. Habrían instalado cables desde su contador al de la mujer. En dos meses, 685 euros en luz.