La apertura del nuevo hospital de Vigo no solo supone el estreno de unas necesarias instalaciones para la ciudad y su comarca, sino que permite reordenar una asistencia especializada que se caracterizaba por la atomización y dispersión de sus servicios. La Gerencia ha culminado el diseño del plan funcional del área sanitaria que se pondrá en marcha con la inauguración del complejo de Beade. Este se convertirá en el "nodo central" de un "sistema multihospital". Se hará cargo de la atención a los pacientes agudos, críticos y de mayor complejidad. Mientras, al Meixoeiro se derivarán los que precisen cuidados intermedios, los crónicos, los oncológicos y los que requieran cirugías sin ingreso; el Nicolás Peña recibirá a los psiquiátricos que ahora se ingresan en el Rebullón y a los de la unidad de tuberculosis; y Povisa se mantendrá como hospital general para la población que así lo elija.

Al margen de este último centro concertado, el Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) contará con una capacidad máxima de hospitalización de 2003 camas, 36 quirófanos, doce unidades de parto y nueve salas especiales. Las urgencias de los hospitales públicos se concentrarán en Beade, pero un Punto de Atención Continuada (PAC), ubicado en el anexo II del Hospital Xeral, dará cobertura al centro de la ciudad en los casos menos graves. Dotándolo con un pequeño laboratorio y servicio de radiología, el Sergas pretende hacer más resolutivo este centro de Atención Primaria y rebajar la presión en las urgencias hospitalarias.

Entre el nuevo hospital y el Meixoeiro suman 223 consultas. Sanidade planea ubicarlas próximas a las áreas de exploración, al objeto de que las pruebas, "de ser posible", se realicen en el mismo momento y no haya que citar al paciente para otro día. Las millones de muestras que cada año se recogen en el área sanitaria se analizarán en el Meixoeiro, donde se potenciará el actual laboratorio para convertirlo en el central.

El complejo de Beade está estructurado en cuatro zonas diferenciadas. La inferior es el zócalo ambulatorio, que contará con entradas propias para consultas externas , el área materno-infantil, el hospital de día y suministros. Sobre esta planta reposan los seis edificios triangulares que albergarán la hospitalización. Ingresarán en ellos pacientes que precisen altos requerimientos diagnósticos y terapéuticos. Veintiuna especialidades tienen reservadas habitaciones. Las cirugías Torácica, Vascular y Cardíaca, así como a Cardiología, por su alto nivel de complejidad, se ubican en la planta más alta (la cuarta), para estar más cerca de los quirófanos (situados a la misma altura, pero en el bloque quirúrgico). Obstetricia y Ginecología tendrán 74 habitaciones. Un número elevado, para que se puedan mantener como individuales. El resto son Digestivo, Cirugía General, Otorrinolaringología, Neurología, Neumología, Cirugía Plástica, Traumatología, Pediatría, Medicina Interna, Oncología, Hematología, Psiquiatría (para agudos) y las unidades del sueño y de ictus.

El estudio Luis Vidal + Architects, creador del proyecto, diseñó una espina de comunicación acristalada que vertebra todo el complejo, entre la zona de ingreso y el bloque técnico, permitiendo tanto la circulación vertical como horizontal. Por últimno, el edificio técnico concentra los quirófanos, la UCI, el área de diagnóstico por imagen y las Urgencias, que dispondrán de un aparcamiento exprés, para aparcar hasta 30 minutos.