"Yo pago unos 17 euros al mes por estar con mi puesto (una pequeña mesa) en las ferias de Ourense y tengo que pagarlo aunque no me instale. Parece poco pero ese dinero en mi país, Senegal, es mucho" dice Mor. Al igual que la mayoría de emigrantes de su país, tienen los papeles en regla. Son los que menos se la juegan "Si venimos de fuera para trabajar, tenemos que tener todo legal, pagar autónomos y eso, porque sino la multa que te pueden poner es mucho peor".

Reconoce que el cobrador de las tasas "no falla viene a cada feria", pero también asegura que es un servicio que es ajeno al concello de Ourense. "Nos llevamos muy bien con los gallegos, no queremos líos. Tenemos todo legal", zanja Mor.