El informe desfavorable que emitió la Xunta de Galicia en julio de 2013 en relación al ERE de extinción y cierre de la planta fotovoltaica T-Solar ha cosechado su primera resolución. La comisión delegada del Gobierno para asuntos económicos acordó el pasado 4 de diciembre reclamar a la empresa la devolución de una subvención de 6,1 millones de euros que el Ministerio de Economía le concedió en junio de 2007.
La ayuda formaba parte del programa de incentivos regionales para fomentar la actividad empresarial en zonas poco industrializadas. Pero además, la resolución penaliza también a la sociedad con los intereses de demora generados, lo que eleva la deuda contraída por esta firma con el Estado a casi 6,8 millones de euros.
La subvención a fondo perdido concedida a T-Solar Global SA con fecha del 14 de junio de 2007 asciende a 6.165.944 euros y fue percibida en su totalidad el 20 de diciembre de 2011. Como condición, la empresa se comprometía a mantener las inversiones subvencionadas durante cinco años, pero meses después los números rojos que arrastraba de ejercicios anteriores comenzaron a provocar los primeros efectos sobre la plantilla de trabajadores, que se vio sometida a dos Expedientes de Regulación de Empleo temporales sucesivos y uno definitivo de extinción en abril de 2013.
La resolución del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas publicada en el Boletín Oficial del Estado el pasado 13 de febrero y sobre la que informó ayer ourensedixital.com explica que la comisión delegada para asuntos económicos inició el expediente de incumplimiento a partir de un informe remitido por la Xunta de Galicia el 12 de julio de 2013. El envío de este documento coincide con el anuncio que entonces realizaba el conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, sobre la apertura de un expediente a la firma T-Solar para el reintegro de las ayudas públicas concedidas al quedar constatado el "incumplimiento de las condiciones pactadas para la recepción de las mismas en lo tocante al mantenimiento de la actividad y los puestos de trabajo".
El expediente instruido, sobre el que todavía cabe recurso, pone de manifiesto el "incumplimiento total" de la condición de "mantener inversiones por importe de 49,4 millones de euros durante cinco años después de finalizar el plazo de vigencia".
T-Solar es una de las ocho firmas que aparecen en la relación de empresas afectadas por este acuerdo y la suya es la subvención más cuantiosa que reclama Hacienda en este lote. En los ocho casos, el incumplimiento afecta al cien por cien de la ayuda concedida.
El proyecto T-Solar llegó en 2007 al Parque Tecnológico de Galicia, en San Cibrao das Viñas, como la segunda mayor fábrica de paneles solares de España y simbolizó la fuerte apuesta por las energías renovables.
Su implantación contó el apoyo del sector público y durante sus años de actividad recibió 13,5 millones de subvenciones de la Xunta y del Estado, además de préstamos en condiciones favorables de ambas administraciones que elevan a 34,5 millones de euros el apoyo que este proyecto obtuvo con cargo a fondos públicos.
Por otro lado, también recibió financiación bancaria, lo que facilitó la puesta en marcha de una planta que apenas se mantuvo cinco años en activo y que acabó entrando en concurso de acreedores en 2013 y dejando en la calle a 170 trabajadores. Hasta la fecha, ninguna empresa ha presentado una oferta en firme para comprar las instalaciones y el proceso se encuentra en proceso de liquidación desde noviembre. Actualmente está a punto de finalizar la primera fase de subasta de la fábrica y la maquinaria con un precio de salida de 3,7 millones de euros. El comité de empresa no tiene constancia de que se haya presentado ninguna propuesta.
