El presidente del PP de Ourense, José Manuel Baltar, descartó ayer cualquier tipo de medidas contra los ediles y cargos del PP cuyos nombres aparecen en las escuchas telefónicas de la operación Pokemon que se han hecho públicas y apeló a mantener la presunción de inocencia y el respeto a la justicia. Baltar Blanco respondió de este modo ayer al ser preguntado acerca de las consecuencias sobre concejales y cargos de su partido que salen en conversaciones o informes policiales de la investigación que instruye la juez de Lugo, Pilar De Lara, y también sobre aquellos que fueron grabados en pinchazos telefónicos pidiendo, por ejemplo, la retirada de multas. Es el caso del portavoz del PP en el Concello de Ourense y su número dos en la Diputación, Rosendo Fernández, que pedía que se le retirase la multa a una amiga matrona de A Merca.