Los cuerpos policiales buscan a dos sospechosos en relación a los incendios declarados en la tarde del miércoles en los pueblos de Cudeiro y Velle, y otros cercanos. Según ha explicado la alcaldesa en funciones de Ourense, Aurea Soto, podría haber testigos que vieron a uno de ellos prendiendo alguno de los fuegos.
Sin embargo, Soto ha lamentado, en rueda de prensa, que algo así "será difícil de probar". El fuego de Cudeiro, en la orilla derecha del río Miño y a dos kilómetros de la ciudad, "parece estar controlado", ha destacado antes de apuntar que en él trabajan ahora brigadas de la Xunta para refrescar el terreno quemado "y evitar que vuelva a comenzar el fuego".
Sobre el que comenzó poco después del anterior en la orilla izquierda del río Miño, ha señalado que aún quedan pequeños focos de fuego, "ninguno grande", y toda la zona es accesible ya "pues la policía local ya no precisa cortar el tráfico para facilitar el movimiento de los medios de extinción", algo que este miércoles sí se hizo en el acceso a ambos lugares afectados por el fuego.
A última hora del miércoles, según ha relatado la regidora en funciones, llegaron unas 80 personas de la Unidad Militar de Emergencias (UME) con ambulancias, vehículos ligeros y motobombas y se incorporaron al dispositivo ya coordinado por la Consellería de Medio Rural con brigadas autonómicas, municipales conveniadas, Seprona, Policía Nacional y bomberos de Ourense.
ESPERA REMATE ESTE JUEVES
La edil y alcaldesa en funciones ha expresado su confianza en que los trabajos de refresco y extinción "rematen hoy" y ha remarcado su preocupación del miércoles por la tarde.
"La verdad es que cuando vi cómo el fuego se extendía por Cudeiro, y luego salía otro al otro lado del río y cómo se iba extendiendo éste de Velle a partir de varios focos, estuve muy preocupada, y la situación me pareció muy compleja, pero el día de hoy amaneció mucho más fresco y ahora sí veo posible que todo eso acabe", ha indicado.
Ha hecho un llamamiento a la reflexión y ha aludido a la intencionalidad de lo ocurrido "como año tras año desde hace décadas". Así, ha apelado a la concienciación para la prevención y la toma de medidas urbanísticas pensando en minimizar los riesgos en caso de incendios como los registrados en Ourense. Por último, ha concluido que un Plan de Urbanismo "también tiene que ver con esto".
"Los ciudadanos deben tener claro que es muy importante dar la alarma y avisar en cuanto vean que ocurre esto para que los autores puedan ser perseguidos", ha finalizado.
Soto ha anunciado también que el alcalde Agustín Fernández retomará su puesto en el gobierno local el viernes, aunque ante la situación de emergencia originada por los fuegos este miércoles se personó en Cudeiro para conocer de primera mano lo ocurrido y acompañar a la conselleira de Medio Rural Rosa Quintana.
REFRESCO DESDE LAS 9,30 HORAS
De los dos incendios registrados en Ourense, el más virulento fue finalmente el de Velle, que se extendió a Sabadelle (Pereiro de Aguiar), y mantuvo a los vecinos más próximos a las llamas en vilo hasta las 5.00 horas, momento en que los integrantes de la UME explicaron a los afectados que la situación estaba bajo control y que podían irse a dormir, según explicó a Europa Press uno de los propietarios.
Gumersindo Rojo indicó que, por la situación de su casa, en un extremo del pueblo de Sabadelle, el fuego la circundó a última hora de la tarde y siguió su avance para cambiar de ladera.
"Hubo un momento en que solté hasta pecados, porque me vi solo ante el fuego pero luego llegaron los militares y alguna brigada y el fuego pasó de largo, a dos metros de la puerta, y se acercó a las casas que están en la otra ladera", detalló y añadió que finalmente pudo dormir al ver que dos brigadas establecían una vigilancia continua en la zona.
El fuego calcinó monte raso, parcelas con la hierba recién segada, árboles frutales y bosque de pinos, robles y alcornoques y rodeó varios jardines y viviendas.
A las 9.30 horas de este jueves un hidroavión comenzó a descargar agua, a pesar de la capa de niebla y humo que cubría la ciudad y la zona quemada.
Así, comenzaron las labores de refresco de la zona desde el aire para reforzar el trabajo que, entre varios pequeños focos humeantes, corrió a cargo de brigadas de la Xunta, UME y otras procedentes de varios ayuntamientos de la provincia como Verea, Gomesende y O Carballiño.
Un peón de la de Verea dijo a Europa Press que su labor durante la mañana sería regar bien la zona más próxima a las viviendas y que para ello contaba con uno de los camiones motobomba de la UME.
Los 80 integrantes de la UME, según Aurea Soto, trabajaron toda la noche, "con sólo un descanso de 15 minutos en el polideportivo cercano para refrescarse" y siguen en la zona.
SIN PISCINA
Entre los daños aún sin cuantificar de estos incendios se encuentra el registrado en tendidos eléctricos y por el cierre de las piscinas municipales de Oira (Ourense), en la orilla del río Miño y situadas entre los dos fuegos, motivo por el que recibieron hojas, cenizas y arena que imposibilita su uso para el baño.
En un comunicado, el Ayuntamiento de Ourense explicó que las labores de limpieza las mantendrán cerradas hasta la tarde.
ESTABILIZADO Y CONTROLADOS
La Consellería de Medio Rural ha informado de un nuevo incendio forestal activo que supera las 20 hectáreas de terreno arrasado. Está estabilizado pero no controlado y se registra en el municipio de Baños de Molgas, en la parroquia de Ambía, desde las 13.00 horas, aproximadamente.
Por su parte, los fuegos de Cudeiro (Ourense), Montedorramo y A Veiga siguen bajo control pero todavía no han sido extinguidos por los servicios forestales.
