El obispo, Leonardo Lemos Montanet, ordenó ayer a dos nuevos sacerdotes, en una diócesis en la que los 200 curas que se encuentran en activo tienen que atender hasta un máximo de 13 parroquias. Esta función se refuerza con la actividad ejercida por cuarenta seglares, religiosos y seminaristas que realizan la celebración de la palabra en Pontedeva, Calvos de Randín, Castro Caldelas, Ribeira Sacra, Amoeiro, A Gudiña y Riós.

Los nuevos sacerdotes son Alejandro Delgado Arce -hermano del diputado del PP Celso Delgado-, de 54 años de edad y natural del barrio de A Ponte, que ejerció como diácono en la parroquia de la Santísima Trinidad, y Juan Fernando Sánchez Montero, natural de Prado de Limia (Muíños), de 25 años, diácono en el Seminario Menor.

La diócesis de Ourense tiene 735 parroquias, muchas de ellas despobladas, por lo que el Obispado tiende a concentrar la celebración de la misa en los principales núcleos.

El promedio oscila entre tres y cuatro ordenaciones de sacerdotes cada año, por lo que en esta ocasión, con tan solo dos, representa "la franja más baja".

Pero a pesar de la crisis vocacional, la diócesis de Ourense mantiene asegurado el relevo generacional. Cuenta con cincuenta sacerdotes con menos de 40 años, por lo que el vicario de Pastoral, José Pérez Domínguez, sostiene que es "una diócesis fantástica en este aspecto; tenemos una juventud que es capaz de llevar adelante lo que haga falta".

A estos hay que sumarle más de 70 sacerdotes con edades comprendidas entre 40 y 60 años, que se encuentran "en plena producción pastoral".

En la diócesis de Ourense hay cerca de noventa curas jubilados, que viven en la Casa Sacerdotal (40), en el geriátrico del Seminario, en algunos asilos y con familiares.

A pesar del bajo número de ordenaciones, el Obispado de Ourense no cuestiona la permanencia del Seminario, que implica el mantenimiento de veinte profesores con doctorado, de los que se beneficia la diócesis por las funciones de apoyo que prestan.

Pero como novedad, a partir del próximo curso el Seminario inicia una apertura, para que se puedan incorporar a sus aulas alumnos externos, además de los que hay en el internado. En la actualidad tiene 75 matriculados y el próximo año espera llegar a cien.