Enrique G.V. se enfrenta a una petición de 8 meses de prisión por hacer un "simpa" en el Gran Hotel San Martín. Tras pasar tres días con un bono estancia de El Corte Inglés en febrero de 2011, pidió quedarse tres días más proporcionando en la recepción del hotel un domicilio falso. Al tercer día a mayores desapareció sin avisar dejando parte de sus enseres en la habitación y una factura de alojamiento y consumiciones de 451 euros. El fiscal lo acusa de un delito de estafa.