Precipitaciones y temperaturas propias del invierno recrean una estampa de enero a apenas un mes de que el cambio de estaciones inaugure el periodo estival. La primavera disimula y los paraguas y abrigos han vuelto a salir del armario. Las lluvias y el aire frío han traído nieve este fin de semana a la estación de montaña de Cabeza de Manzaneda, coincidiendo además con la ofertas de paquetes turísticos -con alojamiento y actividades lúdicas incluidas- con motivo del puente festivo de las Letras Galegas.

Ayer, la cumbre ourensana registró la temperatura mínima de toda Galicia, casi - 3 grados , y una máxima que no superó en ningún momento del día el cero absoluto. Las precipitaciones en forma de copos acumuladas desde la instalación en la comunidad del tiempo invernal obligaron ayer a volver al trabajo a las máquinas quitanieves. Camiones con cuchillas frontales despejaron cunetas y carreteras cubiertas en la estación del macizo central. Según la información de carreteras de la Dirección General de Tráfico (DGT), no se produjeron complicaciones para la circulación.

En toda la provincia, el termómetro no superó, ayer, mediado el mes de mayo, los 15 grados de máxima que se registraron en la ciudad. En Ourense capital los termómetros midieron una mínima de 7,3 grados, que se sitúa casi dos enteros por debajo del valor medio de las mínimas en un mes de mayo, según los registros históricos que tienen en cuenta mediciones desde 1972. El frío también se dejó notar en la montaña de Valdeorras, donde se contabilizaron valores bajo cero en A Veiga, con una mínima cercana a los 3 grados bajo cero, y en Carballeda de Valdeorras, que registró -1 grados.

La cota cae a 1.000 metros

El invierno continúa hoy, según las estimaciones meteorológicas. Hasta entrada la noche se alternará el cielo nublado con los chubascos. Durante la mañana, entre las 6 y las 14 horas, la cota de nieve incluso descenderá a los 1.000 metros, subiendo por la tarde a 1.200, según Meteogalicia.