La decisión sobre la depuración de responsabilidades por la gestión de los fondos del grupo municipal socialista, en lo relacionado con los gastos en bebidas y comidas para celebrar una fiesta al exalcalde imputado, Francisco Rodríguez, corresponderá a "altas instancias del partido", como así aseguró ayer el alcalde, Agustín Fernández, que además advertía de que se trata de una cuestión interna, y que se deberá analizar.

De esa forma se dará respuesta a una de las exigencias que puso encima de la mesa el BNG para frenar la reprobación y petición de dimisión del alcalde, planteada por el PP y que apoyó DO. El portavoz nacionalista, Xosé Somoza, siguiendo el guión marcado por el Consello Local, advirtió que "alguno (por miembros del grupo socialista) deberá marcharse a casa", aunque por el momento deberán esperar para que se cumpla,porque se conformaron con el compromiso adquirido por el alcalde.

Será una cuestión, la de la "depuración" de responsabilidades, de la que "se hablará" en la asamblea de la agrupación local del PSOE que se fijó para el lunes, comentó Agustín Fernández, así como todo lo relacionado con el gasto de la asignación de los fondos públicos al grupo municipal, y que junto al "préstamo verbal" a un alto funcionario del Concello suscitaron una controversia que llevó a intervenir al secretario general del PSdeG, Pachi Vázquez, y que se plasmó con la petición de "disculpas" del alcalde y el portavoz del grupo, Vázquez Barquero, a los ciudadanos.

En relación al préstamo, Fernández es fiel a su estrategia de restar importancia, y no dudó en proclamar que "no tiene mayor importancia". Para recalcar que la justificación del mismo está a disposición de todos los portavoces de los grupos políticos del Concello, eso sí, sin soporte contable, pero de movimientos de la cuenta corriente del grupo municipal, que tiene como titulares a la edil de Urbanismo, Áurea Soto, y a la secretaria particular del Alcaldía Natalia González, sobrina política del exregidor.

Junta de portavoces

Lo que atendió el alcalde fue la petición de la convocatoria de una junta de portavoces, que se fijó para el lunes, 13 de mayo, a las 10,00 horas, con dos puntos en el orden del día, como la constitución de un grupo de trabajo sobre la "ejecución de las mociones" del Concello de Ourense aprobado por el pleno en su sesión de 3 de mayo.

Pero, sin lugar a dudas, el debate se centrará en el estudio de propuestas para el establecimiento de criterios y finalidades de aplicación de los recursos a los que se destinan las asignaciones a los grupos municipales, y para facilitar su transparencia e incorporación a las bases de ejecución a los presupuestos municipales.

Para el alcalde se trata de establecer un código ético y un manual de uso de las asignaciones, con esas medidas de transparencia sobre las que avanzó algunos aspectos en el pleno extraordinario, y que fue objeto de reproche por el PP, al considerar que "no está legitimado (el alcalde) para pretender liderar la transparencia que habitualmente vulnera".

Lo relevante para Fernández es "trabajar en estos criterios de transparencia y buen uso de fondos", y dejar de lado lo que califica de "debates estériles", en un intento de rebajar los gastos en ginebras, whisky o ron añejo.

Sobre esta cuestión se pronunció ayer el presidente de la Xunta, Núñez Feijóo, al considerar conveniente articular medidas para acotar gastos municipales, y sobre todo tomar medidas para evitar "gastos cuestionables", como usar asignaciones de un grupo municipal a fiestas, en alusión al grupo socialistas, al que no citó, sobre todo en la época de crisis por la que se está atravesando.