Después de justificar la compra de alcohol para celebraciones con personas bajo fianza e imputados por jueces y de conceder un préstamo a un funcionario por cuenta de los fondos del grupo, el alcalde, Agustín Fernández, tuvo tiempo para reprochar a ediles que tomasen café con algunos periodistas, aquellos que están desvelando determinadas actuaciones de miembros del gobierno imputados en investigaciones judiciales. Es una de las grandes preocupaciones de un alcalde, junto con la de intentar buscar acomodo a la concejala no electa, Carmen Rodríguez, después de la sentencia del Tribunal Constitucional.