Un nuevo proyecto del gobierno socialista, iniciado en la etapa del bipartito (PSOE y BNG) se encuentra bajo sospecha --como así lo advertía ayer el grupo municipal del PP--, y que en este caso se refiere a las obras del futuro Centro del Conocimiento en la antigua Molinera, el cual se encuentra paralizado al entrar en concurso de acreedores la empresa Gamallo, a la que se le había adjudicado la construcción.

Es por eso que el portavoz popular, Rosendo Fernández, acompañado de otros ediles de su grupo, se trasladó a la zona de O Polvorín, en donde se ejecuta el proyecto ahora paralizado y a la espera de una nueva adjudicación para concluir el 55 de obra que resta --según los datos facilitados por el gobierno socialista-- para explicar que para "esta obra inacabada" se destinaron unos 3 millones de euros.

Una cuantía económica que tiene su procedencia estatal, por una parte un millón de euros procedentes del Ministerio de Cultura en 2009,y por otra los algo más de 1,9 millones de euros del Ministerio de Industria, dentro del Programa Avanza. Según aseveró Fernández, el proyecto estuvo marcado por una "nefasta gestión" que se visualiza en el estado del edificio, y rubricada por "no ser capaces de finalizar el mismo en los tres años iniciales, prorrogándolo sin éxito dos años más".

Ante esta situación, los populares consideran justificadas las "dudas" que tienen sobre todo el proceso seguido, lo que les llevó a solicitar en reiteradas ocasiones el acceso al citado expediente, por lo que reprochan al gobierno socialista que no les diese opción a tener copia del mismo. A modo de anécdota, Fernández alude a que para revisar la documentación los concejales populares tuvieron que acudir a tres dependencias municipales diferentes, además de tener que "tomar nota a mano de los datos".

La obra del Centro de Conocimiento de La Molinera contó con una partida presupuestaria en 2011 de entorno a 1,5 millones de euros, siendo adjudicada en Junta de Gobierno Local el 18 de octubre de ese año a la empresa Construcciones Gamallo SLU por algo más de 1 millón de euros. El contrato se firmó el 8 de noviembre de 2011 y tenía una plazo de ejecución de 12 meses, con lo que la finalización se fijó para noviembre de 2012, sin que se cumpliese lo establecido en el contrato.

Certificaciones

Con los datos que se desprenden de la revisión del expedientes, existen nueve certificaciones de obra entre noviembre de 2011 y junio de 2012, por lo que quedaría por certificar algo más de 30.000 euros, una cuantía económica que para el PP es "a todas luces increíble, teniendo en cuenta el estado actual de las obras", aseguró Fernández.

Pero lo relevante para los populares, además de que "no concuerdan las justificaciones de obra", es que es un proyecto que se inicia en 2008, que tenía 3 años para su ejecución y que se pidieron todas las prórrogas posibles hasta agosto de 2012, y aun así "se tienen perdido 173.065 euros", según las cuentas.

También sorprende que se justificase la compra de ordenadores, programas y pantallas para un edificio sin terminar. Y que se pagase el último día de la justificación 578.386 euros, lo que supone el 33,45% del total justificado en 5 años. Mientras cada mes se pagan 13.000 euros en vigilancia privada de la obra.

Por otra parte, los populares sospechan que el gobierno no podrá adjudicar lo que resta de la obra por no tener presupuestos para este año, con lo que se retrata la gestión que realizan los socialistas.