El presidente de la Audiencia, Fernando Alañón, se refirió concretamente a la influencia de los juicios paralelos en procesos penales juzgados por tribunales populares y expuso casos en los que se llegó a pedir sin éxito una atenuación de la pena por considerar que el veredicto había estado inducido por la presión mediática. Por ello, Alañón considera necesaria una "reflexión" sobre la idoneidad de estos tribunales en casos en los que la presión es "intolerable". Sostiene que los juicios paralelos "pueden afectar a la imparcialidad del órgano que va a impartir justicia".

En este punto se mostró disconforme la profesora de Derecho Penal de la Universidad Carlos III, Isabel Valdecabres, que aseguró no creer en el "mito de la imparcialidad" de los jueces pero matizó que "saber cosas no te impide juzgar con los criterios de la legalidad". A su juicio, debería existir una legislación que impida que los detalles de una investigación "no salten desde el minuto cero" para evitar que se vea afectada la presunción de inocencia "hasta que el caso de judicialice". Quien más se juega, añade, "es siempre el procesado".

La jornadas fueron inauguradas por la vicerrectora del campus, María Lameiras; el presidente del Consello Social de la Universidad de Vigo, Ernesto Pedrosa; el decano de los abogados de Ourense, Arturo Estévez; y el vocal del CGPJ, Antonio Dorado, que defendió una "justicia transparente" para evitar juicios paralelos, aunque reconoce que "los tiempos de la justicia no coinciden con los del periodismo".