La Casa da Maxia es otro proyecto promovido por BNG durante el gobierno bipartito en el Concello de Ourense y ubicado en el casco histórico de la ciudad, que tampoco llegó a inaugurarse.

Tras un reciente pleno municipal en el que el gobierno local reconoció que no sabe ni dónde están las llaves del recinto, se acordó abandonar este proyecto que convertiría a Ourense en referente gallego y estatal al tener la única casa dedicada a los juegos de magia y a formación de nuevos magos, y aprovechar la obra ya realizada, como anexo del centro cívico. El pragmatismo arruinó así por acuerdo plenario, la chistera del colectivo de magos de Galicia, que pretendía convertir Ourense en su sede.

Para el BNG esto no es casual. "Son proyectos que llevaban nuestras concejalías y es un boicot por abandonar el bipartito local", apunta Susana García. La edil nacionalista afirma que esa especie de marginación que hacía el PSOE de sus socios de gobierno "se produjo incluso durante el bipartito, y a pesar de gobernar en coalición, mis antiguos compañeros del BNG se vieron afectados por escasez de personal y sin personal no se pueden poner en marcha los proyectos".