"Soy técnico agrícola de estudios y profesión. Mucho antes de estar en política, algo que yo no escogí, ya era personal fijo en la Diputación y cuando empecé en el centro ecuestre de Sandiás, durante cuatro años los ratos libres los dediqué a ser alcalde de Trasmiras. Trabajaba de noche en la granja y durante el día, en el concello". Emilio José Pazos Ojea lleva dieciocho años en desempeños agrícolas en diferentes escalas y destinos desde que, con 19, empezó a trabajar en la administración ourensana como profesor de la Escuela de Capataces Agrícolas. Después ganó una plaza de peón en unas oposiciones.

Su vinculación laboral con el hipódromo de Sandiás privatizado el pasado año bajo el mandato recién estrenado del actual presidente, ha servido para que el PSOE le atribuya conflictos de intereses para haberse abstenido en lugar de votado en contra, en el pleno extraordinario de hace una semana, sobre la investigación de veinte años de contrataciones de José Luis Baltar.

Pazos, obligado en 2006 a hacerse con la alcaldía tras el fallecimiento de su predecesor, es para la oposición socialista uno de los catorce diputados provinciales del PP que podrían ser recusados -todos menos uno, el alcalde de Avión- por tener más de 70 personas en su entorno personal, familiar o político que trabajan o trabajaron en la Diputación.

El alcalde de Trasmiras y diputado dice ganar 1.450 euros al mes, a mayores de dietas por asistencias a a pleno y comisiones de gobierno, "después de que se votara por unanimidad del gobierno y la oposición mi propuesta de percibir lo mismo que en el centro ecuestre".

Ya es responsable a todos los efectos de la red de perreras cuyo número ni ubicación elude precisar. Pazos justifica que se asignen trabajadores al servicio antes incluso de que los concellos se adhieran y finalicen las obras en instalaciones como la de Xinzo de Limia. "Hay que tener personal para poder ofrecer un servicio y ponerlo a disposición de los ayuntamientos. No puedes dejar a la gente fuera y mañana tener que contratar a otros, pudiendo reciclar el personal".

El alcalde y diputado niega que en el centro privatizado hubiera más trabajadores que caballos, 17 por 15 animales según aireó el PSOE en el último pleno. "Me da pena que los diputados que deberían velar por los servicios no o hagan por simple tarea de desgaste político Las naves estaban llenas. Se puede comprobar en los libros de registro el número de animales. es un dato oficial". Asegura que la necesidad de atención y de cubrición de yeguas de ganaderos -"que no estaban a nombre de la Diputación pero estaban allí"- provocaba que la "mayoría del año no llegaban las cuadras y hasta tenían que dormir fuera".