La labor de investigación del Grupo Ecologista Outeiro y de la Asociación Cultural Mámoa Verde, ha producido un nuevo hallazgo en O Carballiño, concretamente en la parroquia de Santa Uxía de Lobás, donde han encontrado unos petroglifos de unos 5.000 años y pertenecientes por lo tanto a la Edad de Bronce.

Estos petroglifos, los primeros encontrados en su género en este concello, "son una de las manifestaciones culturales más importantes de la prehistoria europea, y aquí aparecen representadas distintas figuras, desde círculos a cazoletas", explica Juanjo Álvarez, portavoz de este colectivos de voluntarios que, como Paco Valeiras o Adolfo Otero, hacen periódicamente con su vocación y empeño en la búsqueda y preservación de este legado, una nueva aportación al patrimonio de Galicia, en este caso con raíces en la prehistoria.

"Hay muchas interpretaciones sobre el significado de estos petroglifos, el círculo concéntrico, es algo muy habitual o la cazoleta, para unos hay significados de ritos chamánicos, otros piensan que ¿por qué no? pueden ser los primeros grafitis con los que aquellos hombres que ya eran agricultores o pastores, se expresaban o pasaban el tiempo mientras cuidaban el ganado", apunta Juanjo Álvarez

El hallazgo se produjo esta vez en los montes de A Madalena, y se suma a otros de estos colectivos, que trabajan de forma intrínseca con escolares del Colegio Vila do Arenteiro, pequeños "indianas jones", a los que tratan de implicar en esta labor, como guardianes del patrimonio en el futuro.

Ya en 2005 estas asociaciones protagonizaron el mayor hallazgo de los últimos años en lo que a arqueología se refiere, al catalogar más de veinte rocas en el concello de O Irixo, en Ourense, que mostraban gran variedad de petroglifos.

Gracias a aquel hallazgo se creó el Área Arqueológica de Cangues, una de las pocas que, como reconoce Juanjo Álvarez pone en valor el arte rupestre.

Este mismo año realizaron otros 25 nuevos descubrimientos, pero su labor no se queda ahí sino que tanto Outeiro como Mámoa Verde pasan a la acción y en este caso, presentaron alegaciones al plan de urbanismo del Concello de O Irixo, para garantizar su preservación. También gracias a su labor de búsqueda, como rastreadores del pasado, encontraron otros 30 túmulo de neolíticos en el Concello de Boborás.

Su labor trata de traspasar generaciones, y en esto días escolares del Colegio Vila do Arenteiro visitaron lo petroglifos guiados por su maestro y descubridor, Juanjo Álvarez, y aprendieron a realizar "toma de datos con cámaras de vídeo, fotografía de alta definición, empleo de Gps para situar los yacimientos con las coordenadas de la planimetría", explica el profesor. "De nada vale descubrir, hacer estudios presentar conferencia, el futuro de nuestra arqueología está en la escuela" ,añade.