El alcalde de Vilar de Santos, Xan Jardón, y los seis ediles que conforman una corporación municipal en la que no hay oposición hicieron ayer efectivo su abandono del BNG, dejando a esta organización sin uno de sus principales feudos en la provincia de Ourense, donde el azote de la escisión les ha despojado también de las alcaldías de Manzaneda y Maceda.

Dado este paso, el siguiente será apoyar durante la campaña electoral que comienza el viernes el proyecto político de Compromiso por Galicia, formación en la que ya se integró hace tres meses el grupo de gobierno de Maceda.

Jardón Pedras, que fue el alcalde más votado de Galicia en las últimas elecciones municipales, inició el camino de la ruptura con la formación frentista en noviembre de 2011 abandonando la corriente Máis Galiza en la que estaba integrado pero sin dejar la militancia. Desde entonces no ha ocultado sus desavenencias con el BNG y su nombre ya figuraba entre los alcaldes que en enero firmaron el manifiesto que reclamaba del candidato nacionalista a la Xunta, Francisco Jorquera, un BNG "más abierto".

Dado que esto no ha ocurrido, justifican, y tras una "profunda reflexión", tanto la corporación de Vilar de Santos como los militantes de la agrupación local han decidido hacer efectiva su baja formal del BNG. Se trata, según hacen constar en un comunicado sin firma, de una decisión "colectiva" a la que llegan por "coherencia política y responsabilidad". Aseguran que se trata de una decisión "difícil pero muy meditada, fruto de un debate sereno y constructivo". Desde la "independencia", precisan, seguirán en la "misma línea galeguista y progresista que siempre defendimos".

Este anuncio público, realizado tres días antes del inicio de la campaña electoral, ha causado malestar en la formación nacionalista, donde aprecian una "clara intencionalidad" por parte de la militancia de Vilar de Santos de "perjudicar" los intereses del BNG en la carrera electoral al gobierno autonómico y "favorecer al PP al trasladar que fuera de este partido hay división".

La candidata nacionalista por Ourense, Tereixa Paz, no cree que esta baja colectiva erosione al BNG porque "el abandono está totalmente amortizado". De hecho, matiza que el alejamiento ya se materializó en la práctica al dejar de participar este grupo, y en particular Jardón Pedras, en la organización interna del BNG. Cabe recordar que el pasado mes de julio, el alcalde formalizó su renuncia a la portavocía nacionalista en la Diputación Provincial alegando motivos personales y para dedicarse con mayor atención al gobierno local. Entonces ya se apreciaron condicionantes políticos.