Cerca de cien descubrimientos arqueológicos en un período de seis años: un logro que el grupo de Acción Ecologista Outeiro ha conseguido gracias al esfuerzo, tesón y curiosidad de sus integrantes.
El portavoz del colectivo, Juan José Álvarez, lo tiene claro: "la diferencia entre los restos de patrimonio arqueológico catalogados en Ourense y los que existen pero no están inventariados y, por lo tanto se desconocen, es abismal".
Esta falta de constancia sobre tesoros escondidos en la provincia con más de 6.000 años de antigüedad, en algunos casos, provoca que "la suerte de una mámoa esté abocada al camino que pase por esa zona", señala Álvarez. Con esta afirmación, el portavoz de la asociación hace alusión a los montes que son maquinados y en los que puede haber vestigios importantes de los que se desconoce su existencia, lo que implica el peligro de que sean destruidos. Las repoblaciones forestales son, en este sentido, un grave factor de riesgo.
Bajo los escombros
Outeiro realizó en el año 2006 el primer gran descubrimiento: el área arqueológica de Cangues (O Irixo), situada en un monte comunal donde se encontraba el vertedero de las obras del AVE. El hallazgo de nueve rastros de roca procedentes de la Edad de Bronce, con una "simbología excepcional", se constituye como revelación de la "mejor manifestación de arte rupestre en la Galicia interior", tal y como señala Álvarez.
El método de actuación es sencillo y eficaz. La asociación ecologista revisa el Plan Xeral de Ordenación Municipal de cada concello, elaborado por la Xunta), para ver los restos arqueológicos que han sido inventariados. A partir de aquí, comienza su fase de búsqueda y recuperación de aquellos que no han sido registrados, con el objetivo de su posterior inclusión en el plan. Su ámbito de actuación abarca parte de la comarca de O Carballiño y de O Ribeiro, un espacio que incluye 25 concellos. Además de lo que se corresponde con la fase de búsqueda y hallazgo, el grupo también dedica parte de su tiempo a informar de estos descubrimientos a las personas anónimas que habitan en el espacio que los rodea, o al presidente de cada monte comunado, por ejemplo. Por otro lado, la asociación también realiza labores divulgativas a través de rutas que explican los yacimientos a los asistentes.
Francisco Valeiras (presidente de Outeiro), Adolfo Otero (presidente de la AA.VV de Madarnás), Juan José Álvarez (portavoz del grupo), Xosé Luis Sobrado (historiador), José Luis Diz (de la asociación de fotógrafos O Potiños), José Manuel Míguez (presidente de la AA.VV Pol de Piteira), y Antonio García (investigador y presidente de la AA.VV Santa Mariña da Cidá), son los artífices de este proyecto de trabajo que ya ha dado grandes frutos a lo largo de su historia.
Petroglifos de 4.000 años en el espacio de la incineradora
El Grupo de Acción Ecologista Outeiro descubrió el pasado enero tres petroglifos de 4.000 años en los montes comunales de Orosa, Cardedo, Menaz, Filgueira y Casares, en el concello de O Irixo. Se trata de la zona donde se proyecta ubicar la incineradora de residuos del sur de Galicia. El arqueólogo Antonio de la Peña confirmó, en el momento del hallazgo, que "son de los buenos".
Éste es sólo un ejemplo de uno de los descubrimientos que ha hecho el colectivo, petroglifos que en este caso podrían estar destinados de forma eterna al desconocimiento (en caso de que se hubiese construido la incineradora), de no haber sido por su revelación por Outeiro.
