"El soterramiento de vías no es viable" en el proyecto de integración del AVE en la ciudad de Ourense. Así de rotundo fue el secretario de Estado de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Víctor Morlán, que esgrimió cuestiones técnicas y un "coste excesivo" para su desestimación, como explicó ayer en la Comisión de Fomento del Congreso, en respuesta a la interpelación del diputado del Partido Popular Celso Delgado.

Morlán, que aludió a la "complejidad" de la integración del AVE en la ciudad, justificó la decisión de rechazar el soterramiento por suponer "un trazado de mucha mayor longitud" y provocar una "gran afección" sobre la línea de alta velocidad Ourense-Santiago una vez que estuviese en servicio al no disponer de la longitud suficiente para "deprimir las vías".

Una vez analizados los diferentes trazados y sin que exista por el momento un pronunciamiento definitivo respecto a la variante exterior o el reformado de la trama ferroviaria actual, –pendiente de que se resuelvan las alegaciones presentadas al estudio informativo–, el Ministerio de Fomento opta por "bajar la rasante lo más que se pueda, para que así haya más movilidad" y alcanzar un "coste asumible" por las tres administraciones, Gobierno central, Xunta de Galicia y Concello de Ourense.

Excusas

Las explicaciones del secretario de Estado de Infraestructuras fueron rechazadas por el diputado del PP Celso Delgado, que las calificó de "excusas", además de asegurar que la ejecución actual del acceso a Ourense de la línea del AVE procedente de Santiago "no obstaculiza" el objetivo de la integración. Recalcó que "además de la enorme anchura de la playa de vías de la estación Empalme permitirá compatibilizar la ejecución del soterramiento con el mantenimiento de la circulación de trenes".

Es por eso que Delgado exigió al Gobierno central que "no discrimine" a Ourense y pidió a Morlán que reconsidere su "errada" decisión de no soterrar las vías en contra de la opinión mayoritaria de los ourensanos y de múltiples asociaciones empresariales y vecinales. También le reclamó "lealtad" para saber aceptar las "posturas serias y constructivas" que tanto desde la Xunta como desde el Partido Popular se vienen haciendo.

Protocolo

Lo que dejó claro Morlán es que "va haber protocolo" para la integración del AVE en la ciudad, y que el proceso de negociación con el Concello de Ourense está pendiente de que "las cifras cuadren y no exista déficit".

Así, explicó al diputado popular que se están analizando los costes de la integración, la aportación de Fomento y los recursos que se obtienen por la gestión de los suelos que quedan liberados, así como lo que "pondrá la Xunta en su momento". Una vez se plasmen esos criterios se procederá a firmar el protocolo, que llevará a la formalización de un convenio "equilibrado en cuanto a ingresos y gastos" para la creación de la sociedad de gestión, de la que formarán parte las tres administraciones (central, autonómica y local) "como se hizo en otras ciudades".

Celso Delgado replicó que después de nueve meses de "promesas" de que se firmaría, tanto por parte del alcalde, Francisco Rodríguez (enero 2009), como del ministro Blanco (enero 2010), la realidad es que "después de nueve meses la única novedad que tenemos es la respuesta del ministro en el Senado, al reconocer que no hay acuerdo entre Fomento y el Concello de Ourense, ambos gobernados por el PSOE, sobre el coste del proyecto", y que están demorando, con lo que se está "perjudicando la concertación con las administraciones afectadas" en todo el proceso de integración del AVE en Ourense.