Operarios de las brigadas municipales de O Carballiño iniciaron ayer las obras de derribo de la casa ubicada en el barrio de Flores, y que había sido declarada en ruina por parte del referido concello. Tras adoptar el acuerdo, la administración local le comunicó la decisión a los propietarios, dándoles un tiempo para que procedieran a su derribo, ya que presentaba peligro para los viandantes y los edificios colindantes.

Transcurrido el plazo, sin obtener ningún tipo de respuesta de los propietarios, el concello contrató a una empresa especializada para quitar la cubierta, y posteriormente inició los trabajos de demolición, con los operarios municipales y la maquinaria de la institución local.

Los trabajos que se están acometiendo tendrán un coste de unos 6.000 euros, que les serán cobrados a los propietarios del inmueble.

El edil de Obras, Manuel Amil, advierte de que "existen otras edificaciones sobre las que pesa una orden municipal para su derribo, parcial o total, y en todas realizaremos en mismo proceso".

Mediante este sistema, el Concello de O Carballiño pretende tener una calle más segura y más limpia.