La primera parcelaria de O Ribeiro, la de San Andrés, sigue siendo un disgusto después de tanto tiempo para muchos de los vecinos afectados por esta distribución de tierras. Y es que con el temporal de lluvias de este invierno son muchas las fincas que están inundadas, no siendo posible usarlas para la agricultura.

Una situación que algunos vecinos indican que las constantes lluvias no son las únicas responsables, sino que se dejaron los regatos públicos sin canalizar y muchos se vieron afectados en su recorrido debido al trazado de pistas. Además "las salidas de las tajeas van directamente a las fincas", observa una vecina, que denuncia que "en todas las parcelarias las aguas quedan acondicionadas pero aquí no lo hicieron".

También se recrimina que desde la Xunta se les dice que no hay dinero para acometer las mejoras pero se asfaltaron tres pistas al monte de las que "dos no se usan salvo una o dos veces al año".

Señalan además que no hay un plan forestal ni limitación de labradíos y que esta situación de falta de acondicionamiento de las aguas está causando enfrentamientos entre los propios vecinos, "que se echan la culpa del agua unos a otros".