"Que puedan ser empleados en igualdad de condiciones", diluyendo las oportunidades de acceso al mercado laboral entre los ourensanos de origen y los inmigrantes que están asentados en la provincia. Víctor Iglesias, presidente del colectivo "Galicia terra de acollida", describe en estos términos las prioridades del programa "Arraigo", una combinación de servicios para la promoción del empleo cualificado que beneficiará en Ourense a un número aproximado de 500 inmigrantes.

La ONG, que implementa con esta iniciativa el proyecto de Red Araña financiado por la UE y el Ministerio de Trabajo, pretende atajar la incidencia del paro en el colectivo extranjero, donde 1.923 personas engrosaban en febrero las listas del desempleo. La premisa es mejorar la inserción sociolaboral de todos los inmigrantes; aunque según explica Víctor Iglesias, esta iniciativa se dirige exclusivamente a quienes han regularizado su situación, poseen papeles de trabajo y precisan renovarlos.

La formación constituye el eje de desarrollo del programa "Arraigo". Los trabajadores sociales de "Galicia terra de acollida" aplican un diagnóstico a cada uno de los participantes en la iniciativa, en torno al medio millar según las estimaciones. En esta primera fase, se recogen datos personales, información laboral y social y otros apuntes que dejen entrever las habilidades y capacidades de cada uno de estos extranjeros. "Cada uno de ellos tiene potencialidades para especialidades distintas", indica Víctor Iglesias. Formar en mano de obra cualificada para que los inmigrantes tengan "las mismas opciones de entrar en el mercado", resume.

Las actividades incluidas en el programa incluyen información para el empleo, orientación laboral para definir las áreas que mejor "encajan" con cada perfil, seguimiento personalizado y asesoría para incentivar en el desarrollo del autoempleo.

Entre las posibilidades emprendedoras de la población inmigrante existen opciones adaptadas a la formación de base de cada uno de los demandantes, tal y como relata Víctor Iglesias. "Hay personas que tienen títulos universitarios en medicina y que podrían optar por crear una clínica propia. Del mismo modo, muchos son profesionales en fontanería o electricidad y podrían decidirse por liderar su empresa", cita a modo de ejemplo.

La ONG confía en que la iniciativa despierte receptividad en el mercado de trabajo. "El empleo con este tipo de cursos no está asegurado, pero lo que esperamos es que las empresas se decanten por un inmigrante con formación antes de por un nacido en España que no tiene las mismas credenciales", considera Iglesias.

Los pronósticos más halagüeños prevén que las empresas con las que ha contactado el colectivo social "reserven al menos un empleo de los 5 o seis que pueden crear para los inmigrantes con formación".

La intermediación entre los demandantes de trabajo y una cartera de empresas conforma otra de las labores de asistencia que realiza "Galicia terra de acollida". La ONG ayuda a organizar la red de contactos, consciente de que "uno de los principales problemas que tienen los inmigrantes para encontrar empleo es el desarraigo, que está estrechamente relacionado con una reducida red de contactos, tan importante para la consecución de un puesto de trabajo", señala Víctor Iglesias. El colectivo trabaja, además de este programa, con 840 inmigrantes de Ourense.