El fiscal José Ucha redujo de 7 a 5 años la petición de pena de cárcel para Victoria Martínez Santos, que actuaba como “correo” del supuesto cabecilla de una red de tráfico de drogas que vendía cocaína en Verín procedente de Madrid y para la que pide una multa de 160.000 euros. Sin embargo, mantiene la condena de cárcel de 43 años solicitada para los otros siete imputados, algunos de origen colombiano, a pesar de que las defensas pidieron la libre absolución de sus clientes, o en caso contrario para algunos, la pena mínima establecida por la ley. La Audiencia Provincial de Ourense dejó visto para sentencia en la mañana de ayer el juicio contra los ocho acusados, vista que se prolongó durante tres días.

Las conclusiones expuestas por el fiscal recogen que Victoria “fue coherente en su declaración, tanto en fase de instrucción como en el juicio e insistió en que actuaba como “correo” de Jorge Luis, con el que viajó a Madrid para comprar cocaína y a los que acompañó su mujer, Carmen, que era conocedora de los hechos”. Así, dijo, “Victoria se autoinculpó” a la vez que insistió en que “no ha habido tratos de favor para ella porque el arrepentimiento y la confesión fue posterior a que se produjesen las detenciones”.

José Ucha continuó manifestando que quedaba totalmente acreditado que Jorge Luis Rojas, su esposa, Carmen Rosa Carrillo, y Cástor Martínez, se dedicaban a la venta de droga en Verín, recordando que el primero reconoció que la droga encontrada en su domicilio era suya, aunque insistió en que su mujer no estaba implicada. “Carmen se acogió al derecho de no declarar en el juicio, pero en fase de instrucción dijo que la prensa hidráulica con la que se hacían los paquetes de cocaína estaba en la vivienda conyugal”. Pide 11 años de cárcel para cada uno y una multa superior a los 800.000 euros.

Con respecto a Castor, el representante del Ministerio Público mostró su convencimiento de que “era el hombre de confianza del matrimonio y Jorge lo llamó cuando lo detuvieron para que fuese a su casa y se deshiciese de la droga, tal y como confirman las escuchas telefónicas. Además, Castor fue detenido a las puertas de la casa de Jorge y Carmen”. Pide para él 12 años de cárcel.

“Vendían en su domicilio”

Con respecto a Élver Rojas Correa, su entonces esposa Mireya Argüello, y el sobrino de ésta, Óscar Fabián Ardila, el fiscal concluyó que “eran los encargados de vender la droga que Jorge adquiría en Madrid y lo hacían en su propio domicilio de Verín. En las escuchas telefónicas se puede apreciar que son sus voces y además hay seguimientos de la policía que confirman la entrada continua y diaria de clientes en su casa”. Se enfrentan a 5 años de prisión cada uno.

En cuanto a Feliciano Sola Albarán, José Ucha recordó que “declaró que Óscar y Mireya estaban presentes cuando le compraba la cocaína a Élver, y que incluso en alguna ocasión fue Óscar el que se la facilitó”. Feliciano reconoció su voz en las escuchas, pero insistió en que no traficaba. El fiscal pide 5 años de cárcel.