El Concello de Celanova impulsa la creación de un hotel-monasterio en el lugar que ahora ocupa el instituto de bachillerato, después de que el conselleiro de Educación, Jesús Vázquez Abad, anunciara ayer la construcción de un nuevo centro docente, previsiblemente junto al pabellón de deportes municipal. Vázquez indicó que el proyecto se iniciará "de forma inminente".
El alcalde Antonio Mouriño contempla la media como "una gran noticia para Celanova", dado que la villa arrastra un enorme déficit en infraestructuras hoteleras. Tras el cierre de algunos establecimientos, sólo cuenta con catorce plazas en casas de turismo rural, una cantidad que considera poco menos que "ridícula", para poder atender la demanda existente.
Sin embargo, padres de alumnos, profesores y representantes de los grupos municipales del PSOE y BNG se oponen a la medida, al optar por la permanencia del centro educativo en el monasterio. Defienden que mantenga el "uso público" frente a la iniciativa que defiende el grupo de gobierno del PP. Antonio Mouriño apuesta por recurrir al modelo mixto, mediante el que una empresa privada se encargaría de la explotación.
Mouriño resalta que Celanova está sufriendo "un duro varapalo económico" por la falta de infraestructuras hoteleras. Recuerda que una parte importante de las 250.000 personas que visitaron la villa durante el Año Jubilar de San Rosendo tuvieron que buscar alojamiento en otros núcleos del entorno y en Ourense. Y ocurre algo similar con los cursos de verano de la Universidad de Vigo, que acoge el monasterio, entre otros eventos.
El alcalde de Celanova contempla la creación del hotel-monasterio como un elemento fundamental para el desarrollo turístico de la villa, ubicada en la "puerta de entrada" del parque Peneda Xurés-Gerés. Dedicará a alojamiento y servicios unos 7.000 metros cuadrados, en cuatro plantas de "un edificio noble, que por sí mismo ya tiene enorme interés".
El Concello se decanta por la creación de un parador-monasterio, pero también contempla la alternativa de poner en marcha un "hotel-monasterio con encanto". El proyecto cuenta con el apoyo de Turismo.
Tanto el alcalde como Jesús Vázquez confían en que el nuevo instituto de Celanova "sea un centro de referencia para Galicia", al estar previsto que disponga de las más modernas instalaciones y dotaciones, frente a las carencias que arrastra el actual en el monasterio, como problemas de calefacción y de canchas deportivas. Mouriño contempla el pabellón municipal como "un magnífico complemento", del que se podrán beneficiar los 400 alumnos que cursan estudios en el instituto de Celanova.
El nuevo edificio estará construido, según las previsiones de Mouriño, dentro de dos años. En el momento que se confirme la fecha del traslado, el Concello se pondrá en contacto con distintas empresas que puedan tener interés en hacerse cargo de la explotación.
El portavoz del BNG, Alfonso Grande, se opone a la medida, al considerar que la permanencia del instituto en el centro de Celanova "le da vida" a la hostelería y a los establecimientos comerciales del entorno.
