La Asociación de Comerciantes de O Couto repartirá 500 tarjetas "anticrisis" entre sus clientes, una actividad novedosa con la que se pretende potenciar el comercio de la zona además de dar facilidades para poder paliar la difícil situación económica que se vive en estos momentos, una iniciativa patrocinada entre otros por Caixanova.

El presidente de la asociación, Julio Prol, indicó que "lo que pretendemos es llenar de clientes el barrio de O Couto, evitando que se vayan a comprar al centro".

Prol destacó que "en estos momentos ya hemos llegados a los 100 establecimientos asociados desde el mes de abril en el que empezamos", entre los cuales "se distribuirán 50 tarjetas para cada uno que podrán repartir entre sus clientes".

Con la tarjeta, que va acompañada por un folleto en el que aparecen los establecimientos que están adheridos a esta iniciativa, se podrán conseguir descuentos de entre el 5 y el 15 por ciento dependiendo de cada comercio, y en otros casos regalos.

Los propietarios de los comercios serán los encargados de repartir las tarjetas entre sus clientes, bien sea por la cuantía de la venta, porque compran en el comercio desde siempre, "eso" según explicó Julio Prol "depende un poco de cada uno, aunque cada tarjeta contará con un periodo de validez de un mes aunque se puedan conseguir más a lo largo del año, y de esta manera se conseguirá un flujo constante de clientes de un comercio a otro".

En este sentido, el presidente de la Asociación destacó que "los primeros que contarán con la tarjeta serán los propios asociados aunque en este caso con una validez de un año".

De todas maneras, Prol explicó que "por una noche que se pase en el Hotel Altiana tendrá de regalo esta tarjeta, de manera, que al salir en vez de tirar hacia el centro lo hagan hacia el Couto".

La concejala de Comercio, Ana Garza, por su parte destacó que "ésta es una buena iniciativa que está encaminada para que la gente empiece a comprar en el propio barrio".

El delegado de la Consellería de Industria e Innovación, Xosé Antonio Jardón afirmó que "está comprobado que la ciudades se sostienen si hay varios epicentros de comercios por lo que la gente para hacer sus compras no tenga porque desplazarse, por eso esta iniciativa promueve una compenetración entre la actividad económica que se desarrolla ahí y las personas que viven en la zona".