La Banda de Gaitas de Cea consiguió su sexto título en la final de la XVIII Liga Galega de Bandas de Gaitas celebrada ayer en Manzaneda, al obtener 95 puntos sobre 100, e imponerse entre otras 70 bandas que competían en esta final, llegadas de toda Galicia y de Portugal.

"El secreto de su éxito no es el pan de Cea", bromeaba ayer el músico Xosé Lois Foxo, director de la Escola Provincial y de la Real Banda de Gaitas de la Diputación, "sino su constancia, que creen en lo que hacen y no regatean horas para ensayar en su tiempo libre", explicó. Su sexto título de campeones, en la liga gallega de gaitas y además en el primer grado, lo que los propios ganadores comparan a los que sería una primera división en el ámbito del fútbol, con el 20 aniversario de la fundación de la Banda de Gaitas de Cea, lo que ha supuesto un doble regalo.

En la cima geográfica y simbólica de Cabeza de Manzaneda, escenario habitual de esta final de la liga gallega, en la que los roncos acarician el cielo, hubo otros premiados. En el prime grado quedó subcampeón, la Banda de la Casa de Galicia de Hospitalet y como tercera clasificada, la banda de Entenza, en Pontevedra.

En el segundo grado, la campeona fue la banda de gaitas de Vilar de Barrio-Sarreaus; la subcampeona, "Frouma" de Piñor y en tercer puesto, la banda de San Bernardo de Aveiro, en Portugal.

En el tercer grado o categoría, la campeona fue la banda de Manzaneda; la subcampeona, de Verea, y en tercer puesto quedó la banda de gaitas "Agarimo" de Catabois, en Ferrol.

En el cuarto grado, la campeona fue la banda de gaitas de San Vicente, de Barrantes, Pontevedra. La subcampeona fue la banda de Vilamarín y en tercer lugar la de San Amaro, en Ourense.

Finalmente, en el quinto grado la campeona fue la banda gallega Celturia de Valencia; la subcampeona Terras do Cigarrón de Verín, y en tercer lugar quedó la banda de Preparatorio B de la Escola Provincial de Gaitas de la Diputación de Ourense.

Para Xosé Lois Foxo, artífice de un trabajo que comenzó hace ya lustros, "lo bonito es que los jóvenes recojan el testigo y que la imagen del gaiteiro se vea ahora con otro respeto y a la gaita como un instrumento de transmisión de la música gallega. Creo que ahora el gaiteiro ha ganado, gracias a estas bandas bien formadas y preparadas, una estima social de la que antes carecía", afirma.

Festa da bica

En el mágico entorno de Cabeza de Manzaneda y aprovechando la presencia de las musas de la gaita, ayer también volvió a celebrarse la Festa da Bica de Manzaneda, una cita gastronómica para ensalzar y divulgar este postre tradicional de tierras trivesas.

En el mismo entorno natural de la sierra y aprovechando de más de 2.000 gaiteiros y cientos de visitantes, se degustaron más de 400 bicas artesanales tras la comida tradicional en ese entorno.