El Concello de Ourense trasladará el matadero municipal a un nuevo emplazamiento, a la vez que remodelará las instalaciones en base a las normativas impuestas en esta materia, según confirmó ayer el director xeral de Turismo y Termalismo, David Cortón. "La decisión está tomada y el tema de la financiación está cerrado", añadió Cortón.

En estos momentos, el proyecto aguarda los informes positivos de las concejalías implicadas en el tema, ya que "se necesitan muchos vistos buenos", puntualiza Cortón sin revelar el nuevo enclave de la instalación municipal. Asimismo, se estima que en siete meses si todo sigue el curso previsto, el proyecto saldrá a concurso público, aunque en la actualidad ya se cuenta con un anteproyecto.

El cambio de emplazamiento se enmarca en las reformas recogidas en el Plan Estratégico de Termalismo presentado en octubre del pasado año y que prevé intervenciones en As Burgas, Campo da Feira y Reza, áreas en las que se construirán balnearios, centros terapéuticos, museos y áreas lúdicas.

En cuanto al tema de la financiación todo está a punto, hay compromisos en firme de todas las partes. Los fondos provienen fundamentalmente de los presupuestos municipales, programas financiados por Industria y contribuciones privadas, entre otros.

Dificultades

El director general hizo hincapié en las dificultades encontradas por el equipo de gobierno a la hora de elegir la zona para instalar el matadero, ya que para emplazar un centro de estas características hay que tener en cuenta muchos factores. Entre ellos, el transporte resulta clave; la conexión por carretera tiene que ser excelente y de fácil acceso para favorecer las exportaciones, ya que la mayoría de los productos del matadero no se quedan en la provincia. Además, otro de los temas delicados en este asunto está relacionado con el tema medioambiental. Un matadero es una fuente rica en residuos sólidos y líquidos que requieren un tratamiento específico.

El traslado del matadero es un paso más en el proyecto termal ourensano, concebido en un plazo de diez años, que permitirá crear en la provincia 700 empleos y albergará a unos 3.000 usuarios al día, lo que se traduce en un volumen de negocio de 52 millones de euros anuales.