La bajada del valor catastral de los embalses, que se hará efectiva en el presente año al modificarse la normativa estatal, supondrá una reducción sustancial en los ingresos que en concepto del impuesto de Bienes e Inmuebles de Categoría Especial (BICE) reciben 24 ayuntamientos de la provincia de Ourense de las empresas hidroeléctricas y que en algunos casos puede llegar al ochenta por ciento.

En los datos aportados ayer por el senador del BNG Xosé Manuel Pérez Bouza, que presentó una iniciativa en la Cámara Alta ante la situación planteada, se constata que la reducción del valor catastral en los siete BICE -embalses- provinciales y municipales de Ourense es de 35 millones de euros.

Además de indicar que el valor catastral se reduce en algunos casos el 50%, subrayó que se puede ver incrementado en otros, como en el de Castrelo de Miño, al introducir el índice corrector vinculado a la antigüedad del embalse, por tener más de 40 años.

Esto supone que la empresa hidroeléctrica, en este caso Fenosa, pase de abonar 240.000 euros a 40.000 euros anuales al Concello de Castrelo de Miño, según las estimaciones que hizo el senador nacionalista, aunque están pendientes de los datos oficiales de la reducción final.

Lo que tiene claro Pérez Bouza es que el Gobierno central con el decreto estatal aprobado en 2007 "beneficia una vez más a las grandes empresas hidroeléctricas", pero a costa "de los más desfavorecidos, en este caso los concellos ourensanos, los más perjudicados de Galicia," que de esa forma "perderán gran capacidad para afrontar muchos de los servicios que prestan a los ciudadanos".

Así, sostiene que la bajada del valor catastral de los embalses, que lleva consigo una reducción del impuesto que cobran los concellos, "no respeta tres principios básicos: la autonomía municipal, la suficiencia financiera y la existencia de ingresos consolidados".

La preocupación de los alcaldes de los concellos más afectados, Castrelo de Miño, el nacionalista Xurxo Rodríguez, y el de Nogueira de Ramuín, Julio Carlos Temes, del Partido Popular, es patente.

Rodríguez Méndez fue rotundo al afirmar que "tiene unos efectos muy negativos para el concello", y espera que la iniciativa de Pérez Bouza y otras que anunció la Asociación Nacional de Municipios con Embalses y Centrales Hidroeléctricas permitan "garantizar esos ingresos", por lo que considera que es fundamental el compromiso del Gobierno central.

Por su parte, Julio Carlos Temes, además de señalar que la reducción catastral "es algo que no tiene lógica", quiere saber "a qué mente pensante se le ocurrió", debido a los efectos negativos que tiene para su concello.

En las estimaciones que hace el Concello de Nogueira de Ramuín pasará con la reducción catastral de recibir anualmente algo más de 240.000 euros en concepto de del impuesto BICE, por los embalses de San Estevo y San Pedro, a poco más de 87.000 euros, lo que supone un recorte importante en los fondos municipales.

Y sostiene que el reparto que se hace "no es lógico ni equitativo", por entender que deben recibir más los concellos que "sufrimos" los embalses, sin repartir en partes iguales con concellos por donde discurre el cauce del río.