Alrededor de 5.000 familias ourensanas están en lista de espera para optar a una vivienda protegida después de lustros de oferta cero en la provincia en en esta materia. La Consellería de Vivenda e Solo ha iniciado los trámites para construir 4.700 viviendas protegidas y está realizando el estudio pormenorizado en cada uno de los ayuntamientos provinciales, para conocer las necesidades de cada municipio. Pero el plazo mínimo previsto está en el horizonte de diez años según reconocen fuentes de la propia consellería.

Esas son las previsiones del avance del Plan Sectorial Galego de Solo Residencial que dio a conocer esta semana Teresa Táboas, titular de la Consellería de Vivenda, durante su visita ayer a Ourense para inaugurar la terceras Conferencias Ibéricas de Sistemas e Tecnoloxías de Información que se celebran en el campus de Ourense. La propia Teresa Táboas reconoció ayer a peguntas de los informadores que la oferta de pisos protegidos es urgente, ante o la subida disparada de los precios de la vivienda tras incrementarse más de un 146% el precio del suelo.

Pisos en Ourense

Para avanzar en esa puesta en el mercado de pisos protegidos "Los técnicos de la consellería están trabajando fondo para conocer las necesidades de cada uno de los 92 municipios de la provincia, y las posibilidades de construir pisos tanto en edificios en altura como en vivienda unifamiliar", explicó ayer el delegado provincial de Vivenda en Ourense, Antucho Espinosa.

En el municipio de Ourense hay ya dos proyectos previstos, para los que dispone ya de suelo la consellería, el proyecto de viviendas protegidas de Covadonga, que ofrecerá 52 pisos, y el de Rabo de Galo que dotará 700 viviendas.

Precisamente ayer la Xunta de gobierno local del concello dio un paso adelante en el proyecto de construcción de viviendas protegidas en Covadonga dado que aprobó de forma definitiva, a petición del Instituto Galego de Vivienda e Solo, el cambio del área de reparto en la que se construirán la viviendas, que pasan de ser de compensación a concierto. Ese es el paso previo necesario para poder realizar en el futuro la construcción de las viviendas protegidas.

La oferta en la capital será la más densa en número de pisos protegidos, por ser donde radica la mayor parte de la población, según el delegado de la Consellería de Vivienda e Solo. "Por eso los técnicos están trabajando en otras seis bolsas de suelo en el municipio, para ver las posibilidades dedicarlos a este tipo de vivienda".

Esto no quiere decir que vayan a salir adelante todos los proyectos pues, según Antucho Espinosa, "a lo mejor estamos trabajando en seis posibles bolsas y luego se consigue suelo en cuatro, tres o en ninguno, pero los técnicos tienen ya los estudios muy adelantados", explicó el delegado provincial.