Los tres juzgados de lo social y los dos de lo contencioso administrativo de Ourense incorporan este mes el programa Minerva, con el que podrán cruzar y compartir dados con la totalidad del sistema judicial español con el fin de evitar posibles fallos, -como ocurrió en el ámbito de lo penal con el "caso Mari Luz"-, tal como indicó ayer en las XXI Jornadas procesales laborales que se celebran en esta ciudad el subdirector general de planificación presupuestaria, medios y nuevas tecnologías de la administración de justicia, Miguel Formoso Sobrado. Los juzgados de instrucción, de lo penal y de primera instancia de la capital ourensana se sumarán al sistema antes de que finalice el año. Las dos secciones de la Audiencia Provincial, el Juzgado de Menores y todos los juzgados mixtos existentes en los nueve partidos judiciales de la provincia ya están utilizando la aplicación Minerva.

La implantación del programa Minerva se inició en Lugo, en este mes empezará a funcionar en Ourense y posteriormente llegará a los juzgados de Pontevedra y A Coruña.

El programa Minerva va a permitir que los jueves y los secretarios tengan conocimiento, a tiempo real, de cómo está la tramitación de casos en su juzgado, de los escritos que se han presentado y del tiempo que llevan sin resolver, disponiendo de una alarma que les avisará en el momento que sea necesario efectuar un trámite en un determinado procedimiento. Posteriormente se pondrán en marcha en los juzgados de lo social de Galicia las certificaciones telemáticas, "lo que va a permitir eliminar la notificación en papel. Las comunicaciones con los abogados se realizarán por internet, siempre que tengan una firma electrónica adaptada", indica Formoso.

El subdirector general explica que el nuevo sistema permite controlar la situación de los presos preventivos en los juzgados de lo penal. "Si hay alguno que está a punto de vencer, el programa emite una alarma, al encenderse cada uno de los ordenadores, para que el juez, el secretario y el personal del juzgado se enteren de que esa causa está pendiente". Y agrega: "Cuestión distinta es establecer un registro general, a nivel nacional, que determine cuáles son los presos que están sometidos a requisitoria. Esa es una cuestión que está siendo analizada, y hace poco tiempo el ministro prometió que a final de año tendremos un registro central, como el que existe para casos de violencia de género".

Con la implantación del programa Minerva, los juzgados se podrán comunicar por internet de forma inmediata, mientras que las notificaciones que realizan en la actualidad, de una ciudad a otra, a veces tardan semanas.

Los jueces y secretarios van a conocer "con dos o tres toques de teclas" la situación real de su juzgado. "Pero eso va a exigir que los funcionarios metan los datos y que se trabaje con buenas prácticas". Con el programa Minerva, la administración trata de dar respuesta a las quejas y peticiones que realizaron algunos jueces, que manifestaron que desconocían la situación real de su juzgado, por el gran volumen de trabajo que tienen.

Formoso afirma que el número de errores judiciales es muy bajo en Galicia, con el anterior procedimiento, pese a que hay miles de procedimientos.