El alcalde de Ourense, con la intención de acabar con "polémicas artificiales y la campaña de descrédito", de la que responsabiliza al dirigente de USO, José Luis Valcarce, anunció ayer que en los próximos días se contratará una auditoría externa para examinar la gestión de la política de personal en los últimos cinco años -entre 2003 y 2008-, con el fin de "dar a conocer a los ciudadanos la actuación de los grupos políticos y personas que tuvieron y tienen responsabilidad directa o indirecta en un tema tan importante", ya que supone un tercio del presupuesto municipal.

Francisco Rodríguez adelantó que la auditoría independiente analizará la gestión relacionada con la convocatoria y realización de oposiciones, composición de tribunales, la promoción interna profesional, los contratos laborales, interinos y los vinculados a programas o subvenciones de otras administraciones, lo que permitirá valorar si la política de contrataciones se hizo en función de las necesidades reales de cada área municipal.

Rodríguez arremetió con contundencia contra "un dirigente político, candidato en las últimas elecciones municipales -por Terra Galega-, y representante de USO, Valcarce Baiget", por estar promoviendo una "campaña de descrédito e intentar deslegitimar" al concejal de Personal, Rodríguez Penín, después de que el gobierno bipartito contratase a 21 trabajadores, y que se debió a la "urgencia de necesidades que había en áreas y se hizo por un período de 6 meses", indicó.

El regidor acusó a Valcarce de "utilizar de forma espuria su condición de representante sindical y presidente de la junta de personal para intentar mantener privilegios personales que tenía en la etapa del gobierno del PP". Rodríguez dejó claro que el gobierno municipal que preside "no va a permitir ningún tipo de privilegio personal, laboral, económico y de cualquier otro tipo", así como que "se presente la política de personal como un `totus revolutus´, con la perversa intención de trasladar a la opinión pública la idea de que todos somos iguales y hacemos las mismas políticas".

Sobre esta cuestión fue rotundo: "No todos somos iguales, y la política clientelar de personal que se hizo con el anterior gobierno del PP, con la complicidad del señor Valcarce Baiget, nada tiene que ver con la política que se está articulando desde el nuevo gobierno", que dijo responde de forma "escrupulosa" a principios de igualdad, equidad, mérito y transparencia.

Componendas

Así, aludió a las líneas básicas de personal que están siendo pactadas, "con total transparencia", en tres documentos públicos: las bases de contratación laboral del concello, las de interinos y el acuerdo regulador que se está negociando con los sindicatos con representación en el concello, que contempla todo lo relacionado con el acceso al empleo público, composición de tribunales, promoción interna profesional, negociación colectiva y las ayudas sociales a los trabajadores del concello.

Lo que llevó al alcalde a proclamar que el nuevo modelo "descarta la política de componendas pactadas en los últimos años entre el Partido Popular y Valcarce Baiget". Y señaló que si en algunas de las 21 contrataciones realizadas por el bipartito hubiera alguna irregularidad, "ordenaría de forma inmediata que se parase", aunque subrayó que cuentan con el aval de los informes técnicos.