"As Lagoas comienza a quedarse pequeño". Esta era la reflexión que desde Moteros do Morrazo se hacía ayer una vez comprobada la extraordinaria afluencia de motos a la cita de Bueu. Según la organización fueron unas 4.500 las motos que no se perdieron una concentración ya clásica y que año tras año bate sus propios registros. De pequeña cilindrada, de mayor caballaje, actuales, clásicos, en solitario o con paquete, las máquinas de dos ruedas se exhibieron orgullosas en el recinto de la concentración pero también por las carreteras de la comarca. La ruta de ayer (Bueu-Beluso-Aldán-Cangas-Moaña y regreso a Bueu por Ameixoada y A Magdalena) sirvió para hacer una primera estimación del impacto de la participación, con una serpiente motera que empleaba casi quince minutos en pasar por el mismo punto. Los expedicionarios recobraron fuerzas en Moaña y retornaron al punto de partida para seguir la fiesta.

Los lusos Nelson Pina y Jaque Stunt fueron los encargados de realizar una exhibición stunt que en esta edición se desarrolló en la calle Ramón Bares debido a la falta de autorización para hacerlo en el frente marítimo, como era habitual. Pero el cambio de ubicación no desmereció un ápice el espectáculo, que continuó poco más tarde con otros dos clásicos de la cita motera, la prueba de decibelios, no apta para oídos sensibles, y la de motos lentas. Los 250 inscritos pudieron disfrutar de la cena y prepararse en la carpa para acometer la ruta nocturna, que tenía previsto desarrollarse a partir de las 00.30 horas por las calles de Bueu. Al regreso esperaba una queimada, música con DJ Rubén y el habitual show nocturno de todos los años.

El programa de hoy prevé un desayuno para los inscritos y una ruta motera posterior con paso por Cela y Marín que comienza a las 11.30 horas. A las 12.30 habrá nueva exhibición stunt de Nelson Pina y Jaque Stunt y a las 18.30 habrá vermú con pinchos y entrega de trofeos.