Pablo Portela y Brais Pazó presntaron en Galiciencia un cohete de combustible sólido a partir de una mezcla de nitrato de potasio y azúcar que provoca una reacción de gases que impulsan el proyectil. Para ello, estos dos alumnos del colegio Eduardo Pondal se inspiraron en los principios físicos utilizados por la NASA para fabricar sucesivos prototipos caaces de alcanar cada vez mayor altura y aceleración.

El proyecto de ciencia ciudadana para la recuperación de la biodiversidad en el rural desarrollado por ocho estudiantes lucenses es el ganador absoluto de la Galiciencia 2018. La iniciativa "Rebinxe", representada en la mayor feria científica de Galicia por Lidia Barreira y María Bouso, del IES San Rosendo de Mondoñedo, fue el mejor valorado por los 40 miembros del jurado entre los 50 proyectos que competían por el premio final, dotado con 1.000 euros.