Que paguen menos los que menos contaminan. Es la máxima que mueve al gobierno tripartito de Cangas a encargar un estudio económico que contemple reducir el impuesto de circulación (rodaje) a los propietarios de vehículos eléctricos, híbridos enchufables o a gas, con menos emisiones que los que tienen motores de combustión diésel o gasolina. El alcalde ha encargado a los servicios económicos del Concello un proyecto para modificar la ordenanza que incluya bonificaciones o exenciones en casos determinados.

"Pensamos que se deben incentivar as tecnoloxías que menos contaminan e a sociedade tamén o reclama", afirma Xosé Manuel Pazos, que asegura que aún no dispone de datos sobre el número de vehículos de estas características que hay en el padrón ni tampoco el impacto económico que generaría en las arcas municipales. "De momento é un punto de partida que debe concretarse, pero temos a vontade de facelo", asegura el regidor, que ya se ha reunido con algún colectivo que promueve este tipo de ventajas fiscales.

Los técnicos deberán elaborar un borrador que será luego analizado por los grupos políticos y debatido en comisión informativa. El ejecutivo local no se marca plazos, aunque los cambios implicarían la derogación de la actual ordenanza y aprobar una nueva, que tendría que superar un período de exposición pública y otros trámites para que pueda entrar en vigor el 1 de enero de 2019.

Bueu ya la tiene...

El Concello de Bueu ya tiene una ordenanza de circulación de vehículos de tracción mecánica similar a la que prepara Cangas, que premia a los titulares de los automóviles menos contaminantes. Así, coches eléctricos, de pila de combustible, de emisiones directas nulas e híbridos enchufables tienen un descuento del 75% en el recibo. La bonificación también se aplica a los que funcionen con gas, bioetanol o tecnología híbrida con catalizadores que minimicen las emisiones contaminantes, mientras que los vehículos catalogados como "históricos" están exentos de pagar rodaje.

... Y Moaña no la contempla

Por contra, Moaña mantiene en vigor una ordenanza que no contempla esas ventajas fiscales y no tiene previsto modificarla, según el concejal de Facenda, Aldán Santamarina. Alega que, de acuerdo con el plan de ajuste, el Concello estaría obligado a incrementar precios si la modifica, y hacerlo no está en los planes del gobierno.