La empresa constructora del tercer subtramo del corredor do Morrazo, la UTE formada por Covsa y Taboada y Ramos, estará pendiente hoy del cielo para poder abrir o no el nuevo vial de O Meixueiro, en Moaña, por donde se desviará todo el tráfico de la vía rápida en esta zona comprendida entre el punto kilométrico 8+200 y 8+800, con el fin de continuar con las obras de conversión del corredor en autovía. La intención de la empresa es poder trabajar durante toda la mañana.

La predicción meteorológica es incierta aunque durante la mañana no cuenta con previsión de lluvia, por lo que la última comunicación que transmitió a la Xunta, como titular de la carretera, es que hoy intentará realizar el aglomerado pendiente y el pintado para poner el desvío en servicio.

De ser posible, se mantiene la previsión que manejaba la Consellería de Infraestructuras que había establecido para hoy tráfico alternativo por un carril en este tramo del corredor -el único abierto de los tres en obras- durante todo el día para, al finalizar, poner en servicio dicho vial de desvío. De aparecer la lluvia, Xunta y empresa pospondrían la apertura del desvío para el jueves, aunque todo se irá decidiendo sobre la marcha en función de las condiciones meteorológicas.

El nuevo vial, con una longitud de casi 700 metros y carriles de 3,5 de ancho, se ha construido para poder realizar voladuras en este tramo del corredor sin necesidad de tener que cortar el tráfico. En esta zona se hace necesario dinamitar un desmonte considerable, de 50 metros de altura por 400 metros e largo, con el fin de ganar espacio para los nuevos carriles de la autovía.

El desvío, con una velocidad limitada a 40 kilómetros por hora, provocará más inconvenientes en la circulación rodada en O Morrazo teniendo en cuenta que siguen cortados los dos primeros tramos del corerdor, entre Domaio y Meira, a consecuencias de las obras de la autovía, y todo el tráfico se desvíam por la PO-551.

La situación se agravará también con el regreso de las restricciones de tráfico en el Puente de Rande. Hay que recordar que los alcaldes de O Morrazo -Cangas, Moaña, Bueu y Vilaboa- habían pedido explicaciones al Ministerio de Fomento por estas obras y siguen pendientes de una reunión con sus responsables.

El Ministerio de Fomento había reabierto los seis carriles del puente el pasado 23 de marzo para facilitar la circulación durante la operación especial de tráfico de Semana Santa, hasta hoy.

Fomento avanzó a principios de año que además de renovar el firme y sanear los paramentos de los viaductos de aproximación, se reemplazarán las juntas de dilatación y se realizarán labores de impermeabilización en el puente. Las obras han provocado retenciones diarias desde su puesta en marcha en los accesos desde ambas márgenes de la ría, sobre todo los lunes y viernes. Hasta el momento los trabajos se han centrado en los carriles que se emplean para circular en sentido Vigo, por lo que la circulación se ha desviado por uno de los dos que habitualmente acogen a los turismos que se dirigen hacia Pontevedra. Una vez finalizada la operación especial de tráfico de Semana Santa, continuarán las restricciones de circulación para finalizar los trabajos de renovación de firme, con el objetivo de terminar los mismos antes de la época estival cuando el volumen del tráfico crece de forma significativa.

Desde que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, inaugurase las nuevas alas de Rande el 30 de diciembre, los trabajadores y la maquinaria no han abandonado el lugar.

Audasa quería abrir el viaducto en 2017 para aplicar ya este año el incremento del 1% anual en los peajes contemplado en el convenio suscrito en 2011 con el Ejecutivo, que marcaba que ese aumento podría aplicarse a partir del 1 de enero siguiente a la finalización de los trabajos de ampliación.

Fomento todavía no aprobó esa subida extraordinaria, aunque sí reconoce que se hará dentro de este año 2018.