El cierre de los primeros seis kilómetros del Corredor do Morrazo por las obras de desdoblamiento y conversión de esta carretera en una autovía se produjo en el pasado mes de octubre y las previsiones pasan porque se mantenga hasta mayo. Todo el tráfico de esta carretera se desvía por la salida de Meira, la EP-1102, y después por la carretera general PO-551. La intensa circulación por estas carreteras interiores, además de generar retenciones en las horas punta, causa un desgaste acelerado de los firmes. Ante este problema la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI) se ha comprometido a reasfaltar los viales y atajar los problemas que están apareciendo en el firme, a modo de reposición, según explicó ayer la alcaldesa de Moaña, Leticia Santos.
Los trabajos de la Xunta en estas dos carreteras comenzarán una vez que reabran los dos tramos cortados del Corredor, en el mes de mayo, cuando el tráfico que atraviese cada día las calzadas interiores de Moaña disminuya de forma sensible. La regidora explica que las carreteras presentan grietas debido a este deterioro. Son especialmente visibles en la bajada de Meira de Arriba, lo que ocasiona quejas de los vecinos de los barrios por los que atraviesa. Asimismo, el reasfaltado implicará volver a pintar de nuevo toda la señalización horizontal de las calzadas, que en estos momentos está muy borrada.
Por otro lado, desde la propia salida de Meira que desvía todo el tráfico se podía ver ayer la nueva extensión del suelo estabilizado a lo ancho de los futuros cuatro carriles de la autovía. La obra del subtramo dos que ejecuta la empresa Dragados -entre el enlace de San Lourenzo y el de Meira- se encuentra ya en un estado muy avanzado, con toda la traza de los nuevos carriles. La explanada de suelo estabilizado está extendida en todo el tramo y resta por extender el suelo de cemento para proceder después a cubrir los carriles con las capas de firme de mezcla bituminosa.
Si el tiempo es favorable la empresa constructora tiene previsto contar con todos los firmes ejecutados, salvo la definitiva capa de rodadura, a finales del presente mes de febrero.
La obra más compleja en marcha en este subtramo es la del segundo viaducto da Mó, que se está construyendo hacia el margen sur de la carretera. En estos momentos los operarios están hormigonando las bases para las barreras de seguridad. El tablero sobre el que se asentará el firme, las pilas y los estribos están finalizados. El segundo viaducto da Mó es una estructura con 11 vanos y 58 metros de altura. Sus últimas vigas se instalaron a mediados del mes de enero. Antes de la reciente extensión del tablero se asentó una armadura conformada por 220.000 kilos de piezas metálicas.
Además, en este tramo de Meira quedan por ejecutar todavía trabajos de sostenimiento de los taludes, vallado y señalización, que deben acometerse en los tres meses que restan para la reapertura del tramo cortado.
En lo que respecta al primer subtramo, en Domaio, casi todos los trabajos están focalizados en la pionera ampliación del túnel de Montealegre, que permitirá salvar el yacimiento castreño de la parroquia. Se prevé que las voladuras de la excavación interior del túnel finalicen este mes. Después quedará la impermeabilización y las demás tareas.
El resultado final, que también tendrá que estar listo en mayo, será el de uno de los túneles más anchos de España, con 21,8 metros. Su longitud será de 90 metros y la altura de 10 metros en el centro de la calzada, mientras que su parte más baja tendrá 5 metros.
Finalmente, en el tercer y último subtramo del Corredor las obras, que comenzaron a mediados del pasado año, avanzan con la construcción del desvío que salvará el gran talud de la zona de O Meixueiro, y que permitirá a la empresa constructora ejecutar las voladuras del mismo sin afectar al tráfico ni a la seguridad de los conductores.
Nuevos cortes el lunes
Asimismo, en este subtramo se están ejecutando voladuras en el talud del punto kilométrico 10+900, cerca de la primera salida de Cangas en la que concluirá la futura autovía. Este lunes, las explosiones están previstas para las 12.30; 15.00 y 17.00 horas. Conllevarán cortes de la circulación estimados en solo cinco minutos cada uno.
