Cuando se pensaba que Cangas había conseguido desmitificar la instalación de antenas de telefonía móvil, vecinos de Darbo recuperaron ese miedo escénico y mantuvieron ayer con el alcalde Xosé Manuel Pazos (ACE) un primer encuentro con el fin de disuadir al gobierno municipal de instalar la antena en el pabellón de O Gatañal, donde juega sus partidos el Frigoríficos Morrazo. Y a pesar de que entre el Concello de Cangas y la compañía telefónica Orange hay firmado un contrato por el alquiler del pabellón para instalar la antena, el regidor local se mostró ayer incluso dispuesto a romperlo en caso necesario. El Concello alquiló un espacio en el pabellón de O Gatañal por 15 años, prorrogables, y 6.000 euros de renta anual. Insistió en que el dinero no era importante aquí.

El regidor quiso mostrar ante los vecinos su total predisposición a un acuerdo y a evitar también conflictos entre vecinos, que asegura que es lo que más teme, porque hace tiempo que mucha gente reclama la polémica antena para poder trabajar o para que no influya negativamente en la educación de sus hijos; mientras que otros aluden a los daños que la citada instalación provocaría en la salud.

Los vecinos que se reunieron ayer con el alcalde pidieron información y estudios, y Xosé Manuel Pazos está dispuesto a atender todas sus peticiones. En este sentido, se pedirá a la compañía telefónica datos sobre la potencia de la antena que se instalará en O Gatañal, que no hay que olvidar que es la que que estaba antes instalada ilegalmente en el camping de Liméns. También se pedirá un informe sobre la distancia al colegio de San Roque (la ley establece que no se pueden instalar antenas a una distancia inferior a 200 metros de un centro de educación) y si hay zonas menos habitadas donde se pueda colocar la antena. Los vecinos comunicaron al alcalde que existía un estudio de Antega en el que aparecen otras posibilidades de ubicación del repetidor. El regidor local reconoció que desconocía la existencia de ese informe y trasladó su intención de conocerlo y tenerlo en cuenta.

Xosé Manuel Pazos insistió mucho en explicar a los vecinos que el acuerdo de la junta de gobierno hace referencia solo al convenio entre Orange y el Concello de Cangas para poder instalar la antena, y por el cual se ingresaría un dinero en las arcas municipales, pero no se aprobó el proyecto que aún no presentó la compañía Orange.

El alcalde se comprometió con los vecinos a llamar a la empresa para pedir que presentara todos los informes y a no tomar una decisión definitiva sin contar con ellos. Sí que Xosé Manuel Pazos hizo mucho hincapié en que no quería que este asunto supusiera una brecha vecinal. Por eso pidió tranquilidad y evitar que este asunto sea manipulado políticamente. También explicó que no hay fechas de ubicación y que la coreografía que tenía el gobierno era ubicar primero la de Nerga, después la de Varalonga y más tarde la de O Gatañal.

Parecía que una vez resuelto el problema de la antena de O Hío, el escenario para las antenas de telefonía móvil sería otro diferente. Pero como se puede comprobar no es el caso. Hay vecinos que siguen argumentando los problemas de salud que traen consigo este tipo de antenas y también está la instrumentalización de este asunto por parte de los partidos políticos, algo que también ocurrió en O Hío y con la antena que estaba instalada en el hotel Hollywood, a finales de la primera década de siglo XXI.